31/3/08

Los colores más hermosos

Son tiempos de emociones fuertes para el Ciclón y para el Barrio. Hace ya unos días comienza a crecer la habitual población de camisetas, gorritos, equipos de gimnasia y todo tipo de divisa que permita identificar al portador con esta pasión tan acendrada en el tiempo y en el espacio físico de Boedo, aunque con dimensión planetaria. Como en los aniversarios trascendentes, aparecen objetos, colecciones, recuerdos e historias -reales o falsas- que inevitablemente conmueven a sus dueños y a quienes las comparten con ellos. Naturalmente, quienes formamos parte de este lugar, cumplimos con todas las características del formulario antes descripto. Y volveremos a encontrarnos esta noche y mañana y siempre en la calle, en la cancha, en un bar, entre "muchachos" que ya no somos y con las familias uniformadas de azul y grana, y con la memoria imborrable de aquellos que nos precedieron y nos dieron a luz en este amor ya Centenario.

Pero, con la melancolía a flor de piel, elegimos pensar en el futuro. En los pibes que siguen viniendo -hijos, sobrinos y pronto nietos- y que siguen alimentando esta marea demente, invencible, sufrida y ciclotímica. Ojalá que en cada hogar sanlorencista sigan llegando los herederos, los sostenedores, los reemplazantes mejores de quienes más tarde o más temprano pasaremos a engrosar la hinchada que rodee al Padre Lorenzo. Para que un grandulón -como alguno de los que aquí refleja sus sentimientos- siga moqueando ante sus amigotes cuando descubre un cochecito poblado por una vida nueva, enfundada en los colores más hermosos.

30/3/08

El Cumple de Papá - Eduardo Bejuk

El nene, tierno, nos invitó a su casa cuando ya restan horas, minutos para el Centenario, qué noble gesto, con la clara intención de celebrar con nosotros y demostrarnos su primogénito cariño. Sí, esa casa que tan bien conocemos y que tan gratos recuerdos nos trae. Festejar allí, para los Hermanos Cuervos, es una costumbre que el paso del tiempo no logra erosionar. Como anoche, cuando la actuación de D'Alesanlo, al fin, nos ilusiona a puro lujo, criterio, gambeta y hasta gol, sí señor, usted podía, Andrés, y el plumaje negro le sienta mejor que el anterior, tan pálido, tan triste, si no que lo diga Menseguez (bien, pibe), que lo diga Rondamón... Encima la metió Silvera, se sigue afirmando Aguirre, volvió Botti, está bien Orión, guardamos jugadores y energía, salvo por la Gloriosa, claro, que nunca se guarda ni un poquito, que empezó la cuenta regresiva y larga el olé, olé, olá, como hay que cantarlo, como lo inventó hace ya dos décadas, mal copiado por hijos y entenados, vuelan las remeras, se preparan las caravanas centenarias, el Ciclón sopla en el Clausura, resopla en la histérica copa y vive en cada garganta. Después de brindar en lo del nene, imponemos la cita en casa, la que levantamos nosotros, no faltés, tenés que estar...

Así es otra cosa


La única circunstancia en la que es susceptible de disfrutarse un paseo por ese descomunal inodoro de la calle Brandsen está vinculada con un triunfo del Ciclón. Y uno, como el de esta noche, que permita dejar de lado -aunque sea por un rato- las preocupaciones que veníamos sumando a la hora de evaluar el rendimiento futbolístico del equipo. Los refutadores del optimismo ya nos han intentado esmerilar las esperanzas indicando que se trató sólo de un partido ante los suplentes de Lanús. Lo que puede ser cierto, pero no menos real es que tampoco San Lorenzo jugó con todo lo suyo y que las performances de D'Alessandro y Menseguez (dos que venían en deuda), no aparecen exclusivamente condicionadas por la jerarquía del rival. Los dos jugaron, corrieron, leyeron casi siempre bien un partido que afortunadamente se abrió rápido, pero que también pudo ser chivo.

No es prudente aún lanzar bengalas de colores, pero dejamos aquí sentado que una actuación así mejora las expectativas de cara a un viaje tan complicado como el que hay que emprender a Ipatinga. Esto no garantiza resultados en esa excursión, pero anima a la gente y -fundamentalmente- debería envalentonar al plantel. Para que, en la victoria, el empate o la derrota, vaya a jugarle al Cruzeiro con dignidad, con convicción y con coraje, aún cuando le toque defenderse.

Otrosí decimos, sin temor a reiterarnos: el pijama utilizado en calidad de camiseta alternativa es, efectivamente, espantoso.

Ahora, a desinfectarse. Y que la próxima visita a ese emporio del mal gusto sea para ratificar la paternidad más larga del fútbol argentino.

Video - Gol D'Alessandro - San Lorenzo 3 vs. Lanús 1

29/3/08

Las dos caravanas

Como cada viernes, la barra se juntó a dar cuenta de unos pocos cafés y unas demasiadas medialunas. Tema obligado: el Centenario, los distintos eventos y las emociones que a cada uno de nosotros nos recorren por estos días. Un par de los aquí presentes reseñamos al resto la fiesta del jueves por la noche en Saint Thomas, una idea bárbara de los pibes de la SubComisión, que no sólo nos permitió reencontrarnos con el Ciclón y muchos de sus personajes, sino también con nosotros mismos, cuando la panza era menos obscena y el techo del balero estaba menos despoblado. Algunos otros contaron que se darían una vuelta por la presentación del libro de Res, que parece -a simple vista- una obra en serio, a diferencia de los "especiales" de ocasión que están sacando los medios del sistema.

De ahí, al tema de las caravanas. Matías es más joven que el resto de nosotros, y contó que arrancaría el lunes por la noche, para luego reprisar en la tarde del martes, que finaliza en el Bidegain con el show ya anunciado. El Gordo Luis, inveterado contrera, avisó que el lunes estará firme, aún con la misa con la que no comulga, pero que el martes no cuenten con él para esas payasadas tinellianas. El Tano, que a veces cansa, encontró la veta precisa para volver con la teoría "San Lorenzo=Argentina", una de sus cantinelas predilectas. Dijo que movilizar dos veces a la gente del Ciclón, con la dificultad que ello encierra en estas épocas, era un despropósito. Envalentonado, se animó a comparar la superposición con el sainete cacerolazo rural vs. piquete rentado del martes pasado. "En la Argentina, se enfrentan las mezquindades. En San Lorenzo: las exclusividades. Yo no puedo entender cómo, siendo la SubComisión del Hincha y DeBoedoVengo dos grupos que tiran para adelante, se obstinan en discutirse y excluirse, en lugar de sumar para la causa común, aún cuando existan diferencias en el pensamiento". Roberto, buceador incansable de la internet azulgrana, contó algunas particularidades del blog Debate Cuervo, que también busca unir a la masa sanlorencista detrás de los objetivos comunes. El Gordo, francamente hinchapelotas a esta altura de la mañana, le espetó: "Entonces, para unir, abrieron una nueva vía de participación. Es una solución demente, flaco".

Nosotros no podríamos asegurar quién tiene razón. Acaso todos, o varios, o circunstancialmente ninguno. De los amigos que discutían ayer, o de los grupos que trabajan en pos de recuperar el Glorioso San Lorenzo, como dice Res. Lo que no se puede obviar es que los tiempos de división han sido propicios para quienes disfrutan con nuestro declive. Y que las últimas dos participaciones masivas de la gente del Ciclón fueron exitosas (año '82 y Rosario '95, en nuestro entender). Otras convocatorias (las marchas contra ISL o a favor de la Reparación Histórica) conmovieron y movilizaron mucho menos, lo que preocupa. Pareciera que la gente sólo va detrás de la pelotita. Y San Lorenzo es mucho más que eso. Por ese motivo, entendemos, hace falta que todos los que comparten esa idea coincidan en algunos objetivos mínimos, como para embanderar a una verdadera multitud que pueda tirar para el mismo lado. Para hacer realidad lo que todos sabemos: "Lo que nunca pudieron fue parar esta hinchada, que se hizo Gloriosa en las buenas y en las malas, la que lleva en la sangre la pasión azulgrana".

28/3/08

El Glorioso San Lorenzo

Se presenta el libro centenario del más ganador.
Tenemos el orgullo de anunciar que el proximo viernes 28 de Marzo a las 19,30 hs en la Biblioteca “Osvaldo Soriano” Inclan y Muñiz, se presentará el Libro Centenario “El Glorioso San Lorenzo” de Adolfo Res, un libro escrito con el corazón sanlorencista, donde cada lector verá reflejada su propia historia y la de sus antepasados.

SUBCOMISIÓN DEL HINCHA
CASLA

Volviendo del bailongo

Ya no estamos para estos trotes. Por lo menos, un par de nosotros. En un rato hay que yugarla, y el cuerpo ya factura estos desajustes. Pero, más allá de las evaluaciones psico-físicas respectivas, corresponde un nuevo aplauso para los pibes de la SubComisión. Los que alguna vez habíamos pasado por el viejo Saint Thomas volvimos a vivir un momento emotivo, que encaja perfectamente con lo que entendemos que es una celebración de la historia: algo tangible, no tan solemne, y que nos permite reencontrarnos con aquellos que han forjado lo que somos.

Un detalle que le faltó a la organizacíon: repartir cataplasmas a la salida.

27/3/08

El Sapo es lo más grande ...

Medio de carambola, como suelen ocurrir las cosas en San Lorenzo, nos enteramos de que el Sapito Villar anda con algún achaque de salud. En el revoleo, ahí andan oficialistas, opositores y comedidos en pleno concurso para ver quién lo ayuda, quién no y quién se merece desalojar de la estampita al Cura Lorenzo. Obviando estas innecesarias mezquindades, el asunto nos preocupa: San Lorenzo tiene una historia bastante cruel de olvido para con sus glorias, futbolísticas o no, y sería bueno empezar a cambiar la bocha en este caso.

Según parece, está en el Hospital Eva Perón de San Martin, en el Sector de Cirugía, habitación 202. Los encargados de este mostrador nos vamos a dar una vueltita el sábado por la mañana, pero sería lindo que -de la manera que cada uno pueda-, el tipo se sienta acompañado de aquellos que le debemos tanto afecto y gratitud.

Y que supere el escollo, como tantas veces desairó a los wines con los que tuvo que lidiar. Amén.

Soberbia - Jorge Lanata

¿Quiénes eran? ¿Por qué salieron? ¿De dónde venían?

La pregunta recorrió ayer la política, los medios y la calle. ¿Eran, como gritaba afónico D’Elía, golpistas del Barrio Norte? ¿Eran militantes de Carrió, como sugirió Alberto Fernández? ¿Era la alianza obrero-campesina, como trasnochó un sector de la izquierda? ¿Quiénes eran?

El martes a la noche algunas decenas de miles de personas en todo el país protestaron contra la soberbia. La mayoría no tenía ni tendrá jamás negocios en el campo, y si tuvieran que dibujar un pollo lo harían en el horno y no picoteando por la tierra. Pero están hartos de la soberbia, de los que siempre tienen razón en todo, de los que se apuran a señalar al enemigo, de los que dicen que quieren dialogar pero primero dictan los decretos. El análisis del Gobierno fue lineal: digamos que la culpa del desabastecimiento es de los que cortan las rutas. Es cierto, pero nadie lo vive así. Ellos cortan las rutas porque el Gobierno empezó primero cortándoles sus ingresos.

–Quienes corten las rutas irán presos –dijo, desafiante, el ministro Aníbal F.

¿Qué hará entonces el Gobierno con el corte de Gualeguaychú? ¿Hay distintos tipos de derechos, o de cortes?

El martes hubo, en la calle, personas hartas de convivir con leyes para uno y leyes para la gilada.

–Siempre estuvimos dispuestos a dialogar. Pero las retenciones no se modifican –dijo el ministro Lousteau.

¿Dialogar, entonces, sobre qué?

El martes hubo, en la calle, personas que saben que se dialoga de a dos y el resto es, simplemente, hacer la venia.

En la noche del martes, llamados oportunos del Gobierno “sugirieron” a los medios que mostraran la imagen de la Sociedad Rural. El Gobierno quería más Miguens y menos Federación Agraria. Lo que se veía en las rutas no eran millonarios: era gente del campo que en la última elección había votado por Lavagna o por Cristina.

El martes también fue bizarro: el error de la Presidenta sobre la laguna La Picasa (mencionada al solo efecto de demostrar su conocimiento del interior, que evidentemente no es tal), la reaparición de Samid y los juegos gimnásticos de D’Elía aportaron ese agobiante humo que aparece cuando sentimos que nuestro país no tiene destino.

El martes a la noche alguien decidió que la patota actuara con libertad plena, sin policía a la vista. Por milagro no hubo muertos ni heridos. La irresponsabilidad de quienes sacaron a la calle “espontáneamente” a piqueteros rentados es atroz.

Como si no hubiera alcanzado la soberbia del discurso, la decisión de disponer fuerzas de choque en la calle fue echar más y más nafta al fuego.

–Están discutiendo plata –escuché anoche a alguien, displicente, descalificando la protesta.

No. Están discutiendo otra cosa. Quieren ser tratados como personas.

26/3/08

El lugar del narrador


Todos tienen razón. Todos. Los productores rurales, que dicen que algunos van a desaparecer con el peaje del 44%. Los piqueteros K, cuando sostienen que esa oligarquía siempre juntó para sí, usurpó las tierras y nunca contribuyó al crecimiento nacional, mientras amasaba fortunas incalculables. De nuevo los del campo, cuando dicen que los impuestos los usan para bancar a los piqueteros antes descriptos y no para construir escuelas u hospitales. Otra vez los de menos recursos, que vociferan que sin la ayuda estatal no tendrían para comer, porque los productores prefieren exportar antes que abastecer el mercado interno. Y así. Hasta el infinito y más allá (Buzz Lightyear, "Toy Story", contemporáneo).

Pero nadie, ni uno solo, busca por un momento salir de su púlpito portátil, para ver qué parte de lo que dice el "enemigo" es atendible. Y la política, con minúsculas, contempla con calculada pasividad hegeliana el kilombo, porque sabe que el croupier siempre pasa el rastrillo. Cuando sale rojo, les lleva a unos; cuando cae negro, embolsa de enfrente.

En algún momento, acaso, alguien advierta la necesidad de construir una sociedad. Porque, aunque los genios de café y/o analistas radiotelevisivos se empaquen en establecer criterios para clasificar la "sociedad argentina", tal entelequia no existe: el suelo de la República lo pueblan infinidad de tribus, sin mayor objetivo que aniquilar a sus vecinos, sin reparar siquiera en el eventual costo de la labor.

El planeta ofrece un variado catálogo de soluciones: Cuba, Estados Unidos, Irán, Suecia, China, Somalia, Uruguay. Sociedades. Los aquí habitantes tenemos pareceres diversos respecto de cada una de ellas, aún entre nosotros. Pero compartimos la certeza respecto de que cada uno de esos modelos permitiría extraer alguna conclusión más sabia que esta carnicería estéril en la que venimos destrozándonos durante los últimos 2,5 siglos.

Si alguien entiende el objetivo, que tenga la generosidad de mandarnos un mail.

Milonga ochentosa


ÚLTIMAS ENTRADAS DISPONIBLES
En el marco de los festejos del Centenario Cuervo organizados por el Pueblo Azulgrana, la SubComisión del Hincha invita a todos los cuervos a concurrir a la Fiesta Centenaria en el boliche St. Thomas, ubicado en Av. La Plata al 700, que por una noche volverá a tener el nombre que supo cobijar a los Cuervos en las décadas del 80 y 90.
La fiesta será el próximo Jueves 27 de marzo desde las 21 horas y contará con la presencia de figuras de la historia del Ciclón, ex jugadores e hinchas.
Solamente se podrá entrar con entradas anticipadas, que están a la venta en el Bar La Leyenda, ubicado en Santander y Beauchef. El valor de las mismas es de $ 30 con consumición y lunch incluidos. Vale aclarar que la capacidad es limitada.
Invitamos a todos los Cuervos a participar de esta noche en la que festejaremos el Centenario de nuestro querido Ciclón en un lugar muy querido por generaciones de sanlorencistas.

SUBCOMISIÓN DEL HINCHA
CASLA

25/3/08

Champán y cacerolas

Apenas ayer, con motivo del infausto aniversario de la dictadura, nos animábamos a trazar un pequeño paralelo -habitual combatiente contra el ocio de esta muchachada- entre San Lorenzo y la Argentina. Sin reparar siquiera en nuestra existencia, ambas entidades nos siguen dando tela para cortar. Volvíamos felices, disimulando nuestras preocupaciones por la falta de fútbol del equipo, pero celebrando la módica victoria ante los pobres bolitas, cuando nos sorprendió el cacerolazo ¿opositor? ¿ruralista? ¿? (estos últimos signos de pregunta los obsequiamos, para que el consumidor los rellene a piacere.

Cada día se entiende menos: a alguna gente de San Lorenzo que se exorbita en la celebración, como si el superado fuera el Milan de los '90, cuando sólo le ganamos 1 a 0, de a ratos pidiendo la hora, y con un penal que preferimos no revisar, a unos bienintencionados obreros del Altiplano, que hilvanaron su cuarta derrota en otros tantos papelones y que orillan el descenso en su deslucida liga local. Tampoco se comprende demasiado a la turba enardecida, que pide la cabeza (o lo que no sea botox que haya en ella) de la buena de Cristina, ayer tan cuarenta y pico por ciento, tan verano repleto en Argentina y en Ezeiza, tan próspera que la gente se asesina en las rutas de un fin de semana largo.

Está bien festejar. Claro. Y también es lógico conservar la mirada crítica. Ahora: ¿es inexorable que todo aparezca tan apiñado, tan exento de discernimiento? Creemos que no. Que no es saludable. Que nos complica la vida. Que nos hace esto tan querible, pero tan carente de sustento, con tan exiguas probabilidades de éxito planificado y duradero. O que nos brinda esa suerte de síntesis tragicómica, en un par de muchachones que se acercaron al "cacerolito" (los aumentativos preferimos reservarlos para cuando ameriten) de San Juan y Boedo, y se perdieron en una esquina entonando "Dale San Loreee, queremos la Copa".

Como nosotros tampoco andamos del todo bien del melón, les regalamos el video del gol, para seguir agregando ingredientes a la eterna ensalada nacional. Pero también para bajar un cambio, e irse a tomar el café del estribo con -al menos- una pizca de voluntad de reflexión.

A domani.

Video - Gol González - San Lorenzo 1 vs. Real Potosí 0

Plegarias prêt-à-porter


Fin de semana largo, ganó el Ciclón, nos fuimos de pesca y nos comimos el producido con la barra de amigos, la semana arranca con fútbol y sol, la cancha va a estar pipona. ¿Se puede pedir algo más? No sabemos, pero vamos a abusar de la paciencia del que atiende en el cielo, rogándole que nos extienda la racha un poquito más, que nos deje llegar a las eliminatorias y que ahí podamos jugarnos la vida a un pleno. Porque creemos que nos lo merecemos, porque anhelamos esa Copa ladina y esquiva, y este año podría ser una ocasión más que propicia para un festejo completo.

Está claro que al Tipo hay que ayudarlo, por lo que es de esperar que el equipo ponga lo suyo, le marque de manera incuestionable las diferencias a estos muchachos que se arrastran por las dos competencias con muchas más penas que gloria y consiga un saldo favorable, para la hipótesis de que quedemos igualados en puntos con los venezolanos.

Como en cada tarde/noche de Copa, la presencia del Bernie ahí arriba es un alivio: nunca olvidaremos su extraordinario promedio de gol en la Mercosur 2001, y lo mucho que lo extrañamos en la revancha con el Flamengo.

Allá vamos, repletos de sueños. En un rato -ojalá- volveremos aún con más.

24/3/08

San Lorenzo, esa Argentina a escala

A quienes pensamos este blog nos engloban unas cuantas afinidades. Entre ellas, no es secundario el lugar que ocupa la idea de que el Ciclón es un extracto perfecto de la sociedad. Porteña, primero; nacional, enseguida. El nacimiento, cruza de épica con carambola; el primer roce con el Mundo, apenas anticipado a la mítica gira de Evita; el destierro y la caída, a los que casualmente nos sometió la época más oscura de la República.

Millones de cosas pueden decirse de la atroz dictadura, y la mayoría de ellas ya han sido dichas o lo serán, por personas mucho más preparadas que los integrantes de esta barra de amigos. Por eso, con la reverencia de los ignorantes, nos limitamos a rescatar un artículo del inmortal Gordo Soriano, que sostiene nuestra humilde tesis, y que machaca sobre aquello que no debemos abandonar. Aunque se jueguen partidos, torneos o copas que ansiemos ganar de manera desesperada y comprensible, si se nos mueren las raíces, nos queda poca vida por delante.

23/3/08

¿Te puedo completar con caramelos?

En la infancia común de los aquí presentes, y de alguno que se fue temprano, hay algunas esquinas comunes, tanto en el ámbito barrial cuanto en la uniformidad de pequeñas memorias. Terminado el post anterior, breve y exhausto, el Cabezón disparó "completalo con caramelos", que era lo que hacía Don José, prestigioso comerciante panaderil del terruño, cuando los tres cuartos de pan que encargaba alguna Madre o Abuela no redondeaban ninguna cifra admisible para la frugal matemática del ibérico. La oferta, va de suyo, era siempre bien recibida, en la medida en que el vuelto era auditado, mientras que los dulces quedaban para el precoz gestor. Con ese criterio, y con la renovada mística de los amigos que vuelven de un viajecito, va una perla del genio de Knopfler, un pibe que anda practicando con las seis cuerdas. Y feliz domingo para todos, como decía Soldán antes de Devoto.

Video - "Brothers in Arms" - Dire Straits (1985)

Lagunas

Al holgazán avezado nunca le faltan excusas: el partido del viernes, las consecuencias físicas y familiares de ayer y una breve incursión pesquera en el Domingo de Pascua nos han alejado levemente de este quiosquito de almas. Pero todo sirve, porque la escapadita a Chascomús sirvió para reunir a la barra, esposas/novias y pibes de los que habemos, alrededor de dos pejerreyes más bien pequeños y otros tres especímenes inclasificables taxonómicamente, al menos para nuestra ignorancia.

El picnic-asado transcurrió animado, sobre todo cuando notamos que nuestra elección de lugar había coincidido con la celebración religiosa, con lo que se desataron los recuerdos de quienes vivimos aquel 19 de abril de 1987 y la tristemente recordada sentencia alfonsinista. Lograr un acuerdo de los presentes resultó impensable, por lo que no vamos a extender el debate más allá de las fronteras, pero lo curioso -o no- se produjo cuando la discusión derivó, por vías que aún no hemos podido recomponer, en la actualidad azulgrana y el proto-exitismo que surge de cara al martes. Que ya estamos prendidos en los dos torneos, que ganándole a Vélez el pendiente estamos a cuatro, que cuando los goleadores empiezan a meterla somos imparables. Ya estábamos preparando la excursión a Tokio, cuando la radio nos pegó un cachetazo recordándonos que bosteros y gallinas todavía participan en ambos emprendimientos, y que es prematuro celebrar.

Mañana retornaremos con menos cansancio, con más tema (político antes que deportivo, seguramente), pero no nos queríamos alejar demasiado de esta costumbre que se nos va aquerenciando, ni ignorar lo que significa para los boedenses un domingo entre amigos, familia y recuerdos. Y el Ciclón, claro. Que está en todos lados, como el de arriba.

22/3/08

Permutamos neumonías incipientes por gol agónico


¡Qué maravilloso espanto! Conviene prescindir de variables con pretensión de objetividad como la temperatura o la sensación térmica: en estos esqueletos inundados aflige un frío tenaz, indómito. Como aquella recordada -inolvidable- noche del otro Sur, cuando le ganamos al Grana 5 a 4, el agua se llevó una parte sensible de las respectivas saludes físicas. Igual que entonces, un triunfo agónico permite escurrir el malestar entre la alegría. Pero la diferencia (discúlpese alguna moderación a la hora del festejo) es que aquello fue épico, repleto de fútbol y vértigo y goles y ganas, y esto se pareció mucho a algunas trabajadas victorias boxísticas de la modernidad, donde no hay Cristo que caiga en un ring, a menos que le llueva un piano en la sesera.

Ganó el Ciclón, y se agradece, porque Lavandina dejó puesta la misma ficha en el paño que hace dos viernes, y el croupier repitió el anuncio. Pero, continuando con el paralelo, si uno deja todas las moneditas en un solo pleno durante varias vueltas, en alguna pasa el rastrillito voraz y uno retorna a Pampa y la vía, a presenciar los desalojos macristas.

Ganó San Lorenzo y sirve para seguir entonados, para pensar en el martes y en una goleada implacable a los tímidos hermanos del Altiplano, para despejarnos un ratito del dolor de la semana pasada. Pero no ocultemos la rotunda verdad: el equipo no juega bien, es difícil que le alcance con tan poquito si quiere sentarse al banquete de los triunfadores.

A los fieles seguidores, les debemos alguna crónica del encuentro de cada viernes por la mañana en Boedo. Por suerte, en el Barrio, todavía hay algunos corazones amables que sostienen la antigua generosidad del fiado.

Un tecito y a apoliyar, si aflojan los estornudos.

Video - Gol Bergessio - Arsenal 0 - San Lorenzo 1

21/3/08

Hubo un tiempo que fue hermoso

Las palabras sorprenden, afortunadamente, aún a quienes procuramos administrarlas. Así, la idea original de este texto se vinculaba a dos aspectos que refrescan infancias no tan lejanas: el fútbol propiamente dicho y sus rituales, que incluían algunos respetos olvidados.

Cuando éramos chicos, hablar de fútbol era eso: el debate sobre tal o cual jugador, el recuerdo de un partido hermoso o de algún bodrio de esos que cada tanto tocaba soportar. Hoy, nunca más vigente, el problema incluye un azar tan significativo como intentar saber si uno va a volver de una cancha.

Y refiriendo puntualmente al tema que dio nacimiento a este texto, los no firmantes de estas líneas arrancamos el viernes, atiborrado de soledad en el Boedo Santo, cavilando sobre las mejores maneras para acercarnos hasta Sarandí en la tarde de hoy. De pibes, ni al más atrevido hereje se le hubiera ocurrido tener que diseñar un plan para ir a la cancha un Viernes Santo. De a poco, el negocio se ha ido devorando los últimos rastros de algunas culturas, con las que puede coincidirse o no, pero que venían resistiendo incólumes durante la friolera de dos milenios.

Pero, al disponer un título y encontrar una imagen, aparecieron inmediatamente dos cuestiones en las que ahora preferimos pensar. De mayor a menor, la inicial remite al rendimiento del equipo. Está fresco el festejo del Clausura 2007 como para sentirnos hoy tan pendientes de un match que debería resultar tanto más sencillo.

La última, pero no insignificante, también relaciona aquella celebración con este momento. Entonces, nueve meses atrás, el fulano de la foto era titular, capitán, emblema y hasta goleador (creemos recordar, sin estadígrafos a mano, que metió cuatro pepas en el torneo). Hoy deambula entre el banco de suplentes y el olvido, y se codea más con el escándalo que con la red.

Que la Pascua nos ilumine. Que, por un ratito, algunas cosas vuelvan a ser como fueron cuando éramos más felices.

Como cada viernes, esperamos regalarles más tarde algún comentario interesante o -cuando menos- insidioso del habitual desayuno.

20/3/08

Homenaje

En el marco de los festejos del Centenario Cuervo organizados por el Pueblo Azulgrana, la SubComisión del Hincha invita a todos a participar del homenaje al músico de rock cuervo mas grande de los cien años de historia del Ciclón, Norberto “Pappo” Napolitano.

Desde la SCH recordamos a los que llevaron con hidalguia la bandera azulgrana, y Pappo fue uno de ellos. Por eso organizaremos un Festival con bandas que homenajearán al Carpo con su música.

El festival se llevará a cabo el próximo sábado 22 de Marzo a partir de las 18 horas en en la Plaza Lorenzo Massa, ubicada en las calles José Mármol y Salcedo, del barrio de Boedo.

Tocarán las siguientes bandas: Señor Maza, Malditos Simuladores, Pájaros Metálicos e importantes músicos invitados.

ENTRADA LIBRE Y GRATUITA

Video - "Una casa con diez pinos" - Pappo

19/3/08

"El" Clásico - Enrique Escandé

"Dicen que me fui de mi barrio, pero ¿cuándo? Si siempre estoy llegando...", murmuraba Aníbal Troilo. Fieles a sus tradiciones, cuervos y quemeros rescataron el pensamiento de "Pichuco" y se disponen a reanudar una historia esencial en el fútbol argentino
Una fecha antes de que terminara el último torneo Clausura, San Lorenzo se proclamó campeón y su gente salió disparada del estadio a celebrar. Miles de hinchas fueron presurosamente a reunirse a San Juan y Boedo a cantar, a gritar, a saltar y bailar. Al otro día me enteré de que un canal de televisión envió un móvil con cámaras y a un periodista al obelisco, para registrar desde allí la fiesta cuerva.

Error. A la media hora los enviados televisivos (de esos que, si los mandás a espiar tocan el timbre) encararon a toda velocidad por Cerrito, Lima, Independencia y no pararon hasta la Avenida Boedo. Minutos después el chamuyeta vociferaba frente al micrófono frases relacionadas con la identidad, el barrio, y la mar en coche.

Pocos días más tarde, Huracán obtenía el ascenso y los festejos tuvieron como centro de reunión y manifestación la Avenida Caseros. Hubo fiesta callejera, alegría cerca de los orígenes, aroma a barrio donde los malvones se aguantan el frío como en ninguna otra parte.

Me alegró esta circunstancia porque el fútbol recupera un clásico de rompe y raja, un derby (como dicen los ingleses) que mantiene su más pura tradición y que es la continuidad en el tiempo de los desafíos de barrio, de barrios pegados unos con los otros. Almagro, Boedo, Patricios y Pompeya para empezar, con sus prolongaciones en Barracas, Constitución, Caballito, Parque Centenario, Flores... Un fiestón que el fútbol añoraba y que "nuestro" fútbol se merece.

Recordé inmediatamente que hace años, en los tiempos en que las cantinas juntaban gente a lo loco cerca del Riachuelo, Boca celebraba los títulos en su barrio, donde montaba una especie de corso fenomenal, y que al otro día la televisión y los fotógrafos de los diarios iban a registrar imágenes de todo lo que se había pintado de azul y amarillo. Una verdadera fiesta "quinqueliana".

La modernización, entendida desde el empelotudamiento, llevó a Boca a organizar sus festejos en el obelisco, y ni hablar de River. No son de ahí, y pueden terminar no sabiendo de dónde son, si eso no ha ocurrido ya. Las fiestas populares en el mundo entero no son transferibles. A nadie se le ocurriría organizar el carnaval de Oruro en Potosí, a sacar de Sevilla a los seises, con sus zapatillas blancas de baile, y llevarlos en la Semana Santa a Madrid. A trasladar la feria romana de Porta Portese a Cinecittá.

A San Lorenzo lo sacaron a empujones de la Avenida La Plata y lo llevaron a la zona de Bajo Flores-Pompeya-Soldati, pero hace pocos días los cuervos (benditos cuervos diría Massa), tenían sobradas razones para celebrar y fueron al lugar al que tenían que ir, al que les ordenó el corazón. Al barrio.

Esta abrumadora muestra de coherencia se produjo también en las huestes huracanenses, y esto confirma que si Buenos Aires tiene un clásico tradicional, emblemático, puro, es el San Lorenzo-Huracán o Huracán-San Lorenzo. Por eso cobra relieve, por enésima vez, aquella frase que el gordo Troilo pronunció como la más maravillosa síntesis del porteñismo: "Dicen que me fui de mi barrio, pero ¿cuándo? Si siempre estoy llegando..."

El fútbol es un hecho cultural y debe tenerse en cuenta que, en nuestra sociedad, es indispensable la esencia que lo sostiene. Los argentinos interpretaron el juego en el último tramo del siglo XIX, y lo acunaron y arroparon con costumbres propias. Hay un fútbol argentino que, independientemente de técnicas y tácticas, sigue necesitando del potrero, de sueños y de respeto por las razones que lo han convertido en poco menos que una religión.

Si el club representa a un barrio y si los colores despiertan amores y pasiones no hay forma de trasladar esos sentimientos al Hilton. Es como poner un pickle en un bizcochuelo, o que hubiesen convocado los festejos en el obelisco.

Las celebraciones frente al monumento inaugurado en 1936, al que Gardel no conoció porque murió un año antes, han terminado generalmente con destrozos de faroles, vidrieras, contenedores de basura, plantas y algunas otras cosas. El fervor de los hinchas en San Juan y Boedo y en Caseros no fue motivo para que se destruyera nada.

Y ese es otro demoledor dato de coherencia. Nadie rompe el barrio o su casa. Festeja, gasta al rival, corea los nombres de los jugadores, manifiesta deseos inconmensurables de conquistas próximas. Esas son fiestas. Lo demás, cartón pintado.

http://www.mundoazulgrana.com.ar/contenidos/noticias/vernoticia.php?id=366

18/3/08

¿De San Lorenzo no te quedó?

Entre tanto dolor, se nos pasó el justo reconocimiento a una patinada olímpica: nos "comimos" un mail que circulaba por ahí, con unos diseños bastante aceptables de camisetas nuevas. La realidad, como siempre, se empecina en proporcionar frecuentes disgustos, por lo que -en el mediodía del sábado- caímos en la cuenta de dos cosas: 1) los diseños no eran los que habíamos "anticipado" y aún evaluado; 2) los nuevos eran de un gusto considerablemente más polémico, aunque nos cueste calificar de "fea" cualquier camiseta de San Lorenzo.

Otro tema, o acaso el mismo, es sostener que la ilustración de este texto (la mina no, señor) involucra de algún modo una camiseta de San Lorenzo. Cierto es que el refinamiento y la modernidad tampoco son nuestro campo de negocios (¿cuál será?), pero este menjunje convida muy poco a ser vestido. Dicen que había una oscura, que ni siquiera se animaron a presentar. Si se toma en cuenta que en y con San Lorenzo cualquier gil se hace el pistolero, no queremos imaginar qué bazofia podía ser la circunstancialmente obviada.

Algún día, ojalá, estos cráneos del haute couture podrían tener la gentileza de consultar a la afición. Ya no esperando el aplauso ni la unanimidad: sólo intentando evitar un nuevo insulto a la esperanza.

Gratitud

Sólo comentarios favorables y palabras de afecto hemos recibido en los distintos ámbitos donde se conoce este pequeño homenaje al sentimiento azulgrana y boedense. Desmesurados, en algunos casos, si se nos permite una opinión. Pero no por ello se puede ignorar el envión al que nos alientan. En esa inteligencia, y dado que hoy anduvimos un poco fiacunes o atendiendo menesteres más prosaicos, va un tanguito por dos monstruos, para que aprenda la pebetada.

Video - "Mano a Mano - Osvaldo Pugliese y Roberto Goyeneche en el Teatro Colón (26/12/85)

Postal de escepticismo

Ninguno de los aportantes a estos desvaríos es un experto en sociología ni en ninguna de sus ciencias afines, más allá de una constante observación de las personas y un afán ostensible por escuchar y sacar conclusiones de cada conversación. Lo antedicho nos excluye de la posible evaluación de los guarismos que exhibe el gráfico. Tampoco nos permite poner las manos en el fuego por el rigor de un sistema que permite a cualquier persona repetir su voto.

En cambio, elegimos una mirada más superficial. Alguien o algunos, entre uno y seis mil y chirolas, tienen la suficiente "confianza" en la imposibilidad de solucionar el problema como para constituir esa opinión en la más respaldada en el marco de la consulta.

Hace un tiempo, alguno de los políticos que atienden o deberían atender a la cuestión de la seguridad y los diseños de políticas en esa materia, expresaba -de manera atinada para quienes aquí nos manifestamos- que la sensación de inseguridad era tanto o más disparadora de malestar que la calidad de víctima de un delito que pudiera investir cada consultado. El paralelo con las conclusiones que deja esta consulta es inevitable.

En el estribo, agregamos: 72 horas después de la muerte de Emanuel Álvarez, el tema pasó por debajo de la mitad de los medios de comunicación. Refuerza el concepto, creemos: si además de ser difícil, nos importa tan poco ¿cómo va a resolverse?

17/3/08

Para levantar: 4 talentos + 1 bombón

Sofia Coppola + Bryan Ferry + Scarlett Johansson + Bill Murray. Más que esto, ofende.

Video - "Lost in Translation" (2003)

Uno que entiende

Hasta el próximo muerto - Pablo Alabarces

Hace un año, la muerte de Marcelo Cejas, hincha de Tigre, a la salida de la cancha de Nueva Chicago desató el clásico aluvión de voces desgarradas y desgarradoras: esto no puede seguir así, son bestias salvajes animales irracionales inadaptados locos. Galmarini acusaba a la inacción política, Tinelli reclamaba un castigo ejemplar al club –dos descensos, decía, que se vayan a la C–, Castrilli prometía duras sanciones a los responsables. Olvidaban que Galmarini fue el responsable de Deportes con Menem, cuando los muertos en el fútbol alcanzaban la módica cifra de casi ocho al año; que Tinelli había llevado a la barra de San Lorenzo, la “gloriosa Butteler”, a festejar el campeonato al estudio de Bailando por un sueño, a pesar de que la Butteler fuera la responsable de la muerte de Saturnino Cabrera en la Bombonera y de Ulises Fernández en el nuevo Gasómetro (hace diez años, en un incidente parecido al del sábado).

Y Castrilli, muy especialmente, olvidaba que uno de los responsables, si no el mayor, era él: que desde mayo de 2003 es el titular de un organismo creado especialmente para solucionar exactamente aquello que había matado a Cejas, y que ahora causó dos muertes en doce horas, una en Salta, otra en Flores. Que está a punto de cumplir cinco años al frente de un organismo con poder absoluto en el control y gestión de los espectáculos futbolísticos en la ciudad de Buenos Aires. Que puede reclamar falta de incumbencia sobre los hinchas de Central Norte que van con una 22 a la cancha y que se matan por accidente en la calle –para que la pobre chica no deba engrosar la estadística: pero… ¿por qué los hinchas van a la cancha con una 22?. Pero que tiene que hacerse cargo por lo menos de Fernando Blanco, asesinado por la Federal en 2005; de Matías Cuestas, muerto por pedradas en 2006; de Marcelo Núñez, muerto por balazos a fines de ese año; de Marcelo Cejas, ya nombrado, y hasta de Gonzalo Acro, también en su jurisdicción. Y ahora de Emanuel Álvarez. Seis muertos en tres años. No hay comisario que resista en su puesto este récord. Peor: si tomamos las cifras nacionales, el responsable federal de la seguridad en espectáculos deportivos ostenta 17 muertos en tres años, retomando la línea ascendente del menemismo.

Esta nota no quiere caerle a Castrilli. O solamente caerle a Castrilli. En él apenas se concentran varias de las caras del problema: ignorancia, soberbia, la madeja de las relaciones políticas que hicieron, por ejemplo, que lo confirmaran en el cargo a pesar de su evidente fracaso de los cuatro años anteriores. Pero el fenómeno lo excede. Y los responsables son muchos más, comenzando por la AFA, que siempre negó un problema del que es parte activa: su jefe de prensa, Cherquis Bialo, insistía en que el incidente del sábado no tenía que ver con el fútbol sino con la “inseguridad” –ese fantasma tan oportuno para justificar tanta ignorancia. Y la complejidad de la violencia en el fútbol comienza por reconocer que no se trata de algo excepcional, ocasional, producto de seres también excepcionales: cuando los medios, los policías, los dirigentes deportivos y los políticos insisten en, repito, “bestias salvajes animales irracionales inadaptados locos”, demuestran que no entienden nada. Apenas algunas pruebas: los vecinos de Mataderos lamentándose de los incidentes del año pasado pero remarcando “cómo corrían los putos de Tigre”; las decenas de miles de “hinchas verdaderos” jactándose del aguante de sus hinchadas; la legitimidad comunitaria de la que goza cualquier “pibe de la hinchada”, el descabezamiento inútil de las barras de River y Boca, perpetuamente renovadas porque la oportunidad de pingües negocios permanece intacta. La violencia en el fútbol no es un fenómeno excepcional debido a sujetos excepcionales, los “violentos”: la violencia es la normalidad, la pauta, la lógica que ordena las prácticas, y que explica tanto una chica con una 22 en Salta como un pibe disparando sobre una caravana en Flores –esté o no esté la barra atrás.

Y también: la violencia en el fútbol no se explica por “la inseguridad”, “la droga”, “el clima social”. Es a esta altura un fenómeno autónomo, con reglas y lógicas propias, todo un sistema moral de normas y legalidades y consecuencias que deben entenderse en sí mismas. Y rodeado de una mayúscula hipocresía social: la de Cherquis Bialo besando al Rafa Di Zeo en cámara, la de Tinelli pidiendo sanciones mientras festeja con la Butteler, la de Macri “desconociendo” a la 12 durante doce años; todos ellos reclamando, al mismo tiempo, la “solución” de aquello de lo que son parte.

La renuncia de Castrilli, la intervención de la AFA, parar el fútbol por tres meses son algunas medidas –y deberían ser sólo el comienzo. Pero si no ocurre esta misma semana, significa que nadie quiere modificar nada y que nos sentaremos cómodamente a esperar el próximo muerto.

*Pablo Alabarces es investigador del Conicet, especialista en violencia en el deporte. Nombrado asesor de Castrilli en 2003, renunció al mes y medio.

http://criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=1097

Como decíamos ayer ...

Hay que remontarla. Convivir con la idea de que todos aceptamos la muerte violenta como algo normalizado y seguimos adelante, con la confianza estadística de que la próxima bala va a encontrar otra vez un cuerpo distinto del nuestro o del de nuestros seres queridos. Así será, hasta que esa estadística se alimente de nosotros. Entre tanto, hablan los políticos, los dirigentes del fútbol, los policías y hasta los testigos -reales o mitómanos- que buscan y consiguen sus quince segundos de fama.

Si los que escribimos aquí fuésemos investigadores, se nos habrían ocurrido algunas preguntas menores, buscando esclarecer el hecho concreto y tratando de separar la abundante paja del escaso trigo:

1.- ¿Alquien sabe en qué lugar exacto de la Ciudad recibió el tiro Emanuel? No necesariamente tiene que haber ocurrido en el lugar en el que lo bajaron. Si se atiende a los relatos de los testigos de éste y otros hechos delictivos, pareciera existir la posibilidad de que haya recibido el balazo en un lugar y que el malestar se manifieste unos cuantos metros, cuadras y/o minutos más adelante.

2.- ¿A qué hora ocurrió? Todo hace suponer que fue entre 15.20 y 15.40, pero el dato también es crucial, porque permite descartar a todos aquellos que hayan pasado su entrada por la cinta magnética con anterioridad al suceso, lo que acotaría sensiblemente el espectro, aún en la hipótesis de que pudiera haber sido alguien de San Lorenzo, lo que hasta ahora no encuentra justificación para ser afirmado.

3.- ¿De qué lado del micro estaba Emanuel? Por perogrullada que parezca, nadie dice esto, que resulta clave para saber -por ejemplo- si el tiro pudo venir de la vereda de La Quemita o de la vereda de la parrilla (si estaba sentado de la derecha, la solución es la primera y viceversa).

4.- ¿Quiénes iban en el mismo micro que Emanuel? Siguen hablando una oligofrénica que en cualquier momento relata la muerte de Kennedy, pero no dice si iba con él, un muchacho que sostiene que estaba en otro colectivo y el Jefe de Seguridad de Vélez, que parece tener especial interés en desvincular su propia responsabilidad. En especial, interesa la declaración del conductor, quien habrá sido requerido/increpado a detenerse.

5.- ¿Qué medidas tomó la Federal para aislar la escena del crimen? Si ocurrió enfrente de La Quemita, la respuesta es obvia, porque un ratito después de salir del Nuevo Gasómetro, algunos hinchas de Vélez volvieron por ahí y destrozaron todo, sin que nadie se interpusiera para preservar las eventuales pruebas.

6.- ¿Qué medidas disciplinarias adoptó la Federal y el Ministerio de Justicia respecto del imbécil del taquero que dijo "el operativo fue perfecto"?

7.- ¿Qué datos brindó el Club Atlético Vélez Sarsfield respecto de los ocupantes de cada micro? Los dirigentes se cansaron de decir que su habitual organización es impecable, lo que debe suponer que tienen los datos de quiénes van y cómo se reparten, para prever situaciones como la ocurrida.

8.- ¿Cuántas declaraciones testimoniales tomó ayer el Juez y/o el Fiscal intervinientes en la causa? El hecho de que sea domingo no lo convierte en imposible. Lo que lo convierte en imposible es la ineficacia y la desidia.

Sin ninguna de estas acciones, y alguna otra que se le ocurra a alguien que conozca específicamente el derecho penal y la investigación criminalística, pueden ofrecer cien millones de euros, que la sensación de burla va a permanecer inconmovible.

Ojalá que en la próxima podamos hablar de fútbol, del barrio, de música o de cine. De muerte, basta para nosotros, por favor.

15/3/08

Un tiro en el pecho

¿Qué carajo se puede decir que no se haya dicho? El cadáver de un pibe, de un hijo, de un hermano, de un amigo, de un novio, los sueños de una vida están todavía tibios y uno se vuelve silbando bajito, evitando derramar lágrimas que son ajenas, mientras no falta el que pregunta por los puntos, por el calendario, por la clausura de la cancha ...

¡Muchachos, se murió un pibe! Que como único "pecado" a garpar arriba tiene el de haber querido ir a la cancha, o tomado el camino equivocado, o no haber visto el auto, o no haber corrido del tiro. Si no cabe eso en el balero, esta sociedad tiene un problema grave. Si alguno se hizo fanático del fútbol para celebrar muertes, tengan a bien detener esta calesita, que un par nos bajamos acá.

Pensar que hace un rato hablábamos con la barra de amigos con la que nos acodamos juntos sobre las nuevas camisetas, la diferencia en el historial con los fortineros, el concepto de "grandeza" asociado al fútbol y tantas otras cosas que ahora suenan a oprobio ante la magnitud del dolor. Pero, huelga decirlo, cualquier expresión futbolera carece de la malicia homicida.

Los hinchas de verdad no matamos a nadie: a nosotros, esta tarde -otra vez-, nos pegaron un tiro en el pecho.

Siempre lo mismo

Sin entrar en detalles que conspiren contra el anonimato que pretendemos quienes nos escondemos en este rincón, puede afirmarse que la mayoría de los autores somos gente de edad avanzada, más cerca del abuelazgo que de Disneylandia. Ese dato objetivo puede mover a engaño, alimentando la suposición de que alguno está de vuelta, lo que dista en años luz de la realidad. El asunto es que, a pocas horas de cada partido del Ciclón, recrudece ese concierto de tripas desvencijadas, indomables, que permiten augurar un almuerzo frugal, pero a la vez indigesto.

Particularmente, cada vez que nos toca enfrentar a estos descastados de Liniers, miserables con pretensión internacional, el humor es aún más tumultuoso. Se desea una goleada inapelable, que deje de lado toda referencia comparativa entre la Grandeza propia y la injustificable aspiración de estos cachafaces venidos a nuevos ricos.

Llegamos sacudidos de emociones y traslados, con el alma en expansión y los cuádriceps inciertos. Venimos de un par de años sin recordarles a estos tipos quién es quién en este asunto del fóbal grande. El sol raja la tierra y parece esconder una sonrisa amable. En Boedo, ya, una muchedumbre interesante renueva su compromiso con los colores de siempre, en diseño aggiornado (esperamos dejar de lado por un rato la habitual torpeza y conseguir imágenes de la presentación de las nuevas camisetas).

La moneda está en el aire. A la noche, Gloria o Devoto, más novedades para este boletín.

14/3/08

De las medialunas y los populismos sobreactuados

¡Ay, Dios! Inexorablemente, este post va a armar kilombo. Porque "hay cosas con las que no se jode", dirán algunos y acaso tengan razón. Pero el diálogo suscitado en el desayuno de hoy amerita una transcripción lo más fiel posible.

Cuando dos de los presentes arribamos al Pugliese (nosotros sabemos que se llama "Recuerdo", pero qué se le va 'cer), el Gordo Luis despotricaba contra las medialunas de manteca, y desarrollaba su afirmación de que había que ir a Miño (San Juan y Boedo, en diagonal al Homero Manzi), donde -aseveró- "cambiaron de proveedor y ahora son un manjar". El debate carecía de mayor atractivo, pero no por ello fue breve. Ligeramente esgunfiado, el Tano (los nombres serán mantenidos en rigurosa clandestinidad, especialmente los de los "blasfemos") contó que había visto en el blog la foto del piloto de Ferrari con los de Kiss, sobre cuya edad se discutió también largo y tendido. No faltó quien sostuviera, con creíble énfasis, que Gene Simmons festejaba 70 años en el 2008, lo que a algunos nos sonó ligeramente exagerado.

Sin escalas, la conversa fue para el lado de la pregunta que hoy se le había ocurrido a Mati en forma de afirmación "si éste nacía acá, seguro que era Cuervo", dijo el benjamín de la tropa. Pero, como él mismo escribió de madrugada, no se sabía si eso era un dato positivo o un baldón. El Tano, uno de los sempiternos Refutadores de Leyendas sobre los que escribió Dolina, indicó (sic) "Igual que Guido". Preguntado sobre la identidad del aludido, el Tano aclaró que era una joda por el trabuque del Bambi, cuando habló de "Guido Mortensen".

"No, pará, eso es otra cosa", sostuvo Mati, algo incómodo por el parentesco endilgado y por ser el provocador de la discusión. "Ese chabón es un fenómeno gracias al cual San Lorenzo estuvo en la fiesta de los Oscar".

El Tano, que era pie en el diálogo, desarrolló una teoría extensa, cuyos puntos salientes se enuncian seguidamente, a los efectos de sondear a la afición. Según el tipo, había un hilo conductor que hermanaba a figuras tan aparentemente distintas como Figueiredo (ex-presidente brazuca), Cheek, Viggo y el mismísimo Marcelingui: "Todos esos muñequitos -según el Tano, conste- descubrieron un modo sospechosamente eficaz de mostrar su pertenencia a un afecto decididamente porteño, que de carambola les ha servido a sus propósitos políticos, comerciales o vaya uno saber de qué índole. Cuando Cheek era socio del Turco, consiguió que el Diego hablara de su tortuga y la gilada de su camiseta azulgrana, y poquitos le dieron bola a lo que en realidad representaba".

El discurso era mucho (muchísimo) más largo, y enunciaba en algún punto las distintas conspiraciones vinculadas al asesinato de Kennedy, el no-viaje a la Luna y otros detalles ideales para quienes practican la paranoia. Mati se vino con una bronca de la hostia, pero el asunto quedó picando. La mezcla de porteñismo-excentricidad-sentimentalismo de los aludidos ¿es real? ¿está exagerada en la construcción de sus respectivos personajes?

La verdad, parece demasiado. El problema es que la antítesis también resulta ligeramente inverosímil. ¿No?

El regreso + Los once

Hace un ratito, hablando con Niembra, Ramón confirmó la formación que va mañana contra Vélez. Vuelve D'Alessandro, además de Silvera y Tula entra por Bianchi Arce. Orión; A. González, Tula, Aguirre y Placente; Rivero, Chaco Torres, Hirsig y D'Alessandro; Bergessio y Silvera son los elegidos para bajar a los pandilleros.

Más tarde, si afloja el temporal de gente en el boliche, imperdible diálogo matutino con los "refutadores de ídolos". ¡No se lo pierda!

Tango centenario en "La Leyenda"

La SubComisión del Hincha invita a todos los Cuervos a participar del evento de Tango Centenario que se realizará hoy en el bar "La Leyenda", sito en Santander y Beauchef, a partir de las 20 horas.

Será una reunión en la que se recreará el espíritu tanguero de antaño, en un lugar bien sanlorencista que no fue afectado por el modernismo y que mantiene las calles de adoquines que supieron transitar los Cuervos durante décadas.

Actuarán los cantantes Alberto Miranda y Rubén Serrano, acompañados por el maestro Adolfo Vega en la guitarra y habrá invitados sorpresas para completar una velada inolvidable.

Invitamos a todos los Cuervos a participar, la entrada será libre y gratuita.

¿Nada que ver?


De raje para el habitual desayuno de los viernes en el Pugliese (Boedo y Carlos Calvo, por si Ud. nació en Venus), observamos la foto que ilustra este envío, publicada en la víspera por el matutino Olé, no sin sonrojarnos. Aclaraciones preliminares: a) los aquí firmantes tenemos una reconocida simpatía por el cavallino, heredada de la sangre peninsular; b) ¿qué mortal de 35-50 años no tuvo sus 15 minutos de culto hacia los pintarrajeados (hoy gente provecta, que ya podría largar el rimmel)?

La reflexión camina por esta senda: el finlandés era un muchacho de perfil más bien bajo, hasta que en la kermesse de fin de año manoteó el título que el desteñido Hamilton y el galleguito que dio el mal paso se empeñaron en resignar. Ahora, con la impunidad de los Campeones, posa con Kiss "alla Diegote de Fiorito".

Un pensamiento, para desarrollar en futuros envíos: si este farabute hubiera nacido en Santa María de los Buenos Aires, ¿de qué cuadro sería? Las eventuales respuestas no tienen -necesariamente- que alegrarnos.

La seguimos.

13/3/08

¡Primicia! Salieron los nuevos modelos

Acá nos leen poquitos, y no pretendemos decepcionar a la afición. Pero pareciera que éstas son las Camisetas que se presentarán el sábado. En este barcito las consideramos muy superiores a inventos previos, si es que los bocetos se corresponden con sus correlatos físicos.

Por otro lado, el que ya las conozca, tenga en cuenta que no se pretende chorear a nadie con lo de "primicia". En todo caso, para nosotros, efectivamente lo es.

Por hoy, nada más.

Vermucito, para matizar la espera de noticias

Los gladiadores azulgranas entrenan en un rato, por lo que no hay mucho para contar, en lo que a fóbal refiere.

Los que despachamos en este mostrador abrevamos en una heterodoxia artística que podría englobarse dialécticamente como "cualquier fruta". Tampoco somos de ofensa fácil, así que -lejos de calentarnos-, les regalamos una gragea de un talento que anduvo por este puerto y que, sin saberlo, también ha sido una influencia favorable para la suerte deportiva del Ciclón. De hecho, algunos fabuladores sostienen que este tema fue registrado en el preciso instante en el que Sugus Chávez nos devolvía la respiración con la inolvidable tijera.

Video - "Black Magic" - Jarvis Cocker en La Trastienda (11/3/08)

"No te chivé, tri tri"

Tras el gran diluvio, es usual ver las calles hechas una mugre: es claro que la suciedad sale a flote en el momento de confusión y se esparce sin criterio. También resulta natural que nadie se pone a limpiar en esa instancia, en la que sólo nos preocupamos por salvar la integridad. La metáfora no requiere demasiado subtítulo: los diarios de ayer destacaban la gran victoria del Ciclón en Potosí; los de hoy se relamen con el escandalete que habría armado Ramón apenas pitó Larrionda. Ese aspirante a "estrellita-malaleche" del periodismo deportivo, Gourovich, es el más enfático en su impostado fastidio.

Puestos a elegir entre un empleado del multimedio y el técnico de la divisa, solemos apurarnos a defender al más cercano al afecto. Pero proponemos, sólo por un instante, sustraernos de la falsa opción. Cuando llegó a Boedo, cuando fue a lo de Tinelli, cuando convocó a los medios para anunciar que regalaba una camioneta que todavía no aparece, cuando se sienta a solas con Niembra, el riojano les da piedra libre a los miserables propietarios de la calesita. Suponer que se puede cantar "basta para mí" cuando a uno le viene en gana, es iluso y quiebra las propias reglas aceptadas de movida. Entonces, Ramón querido, a llorar a la iglesia de Palau: los diarios tienen páginas de deportes, de humor, de espectáculos y fúnebres. En todas ganan. El lugar donde vas a salir la semana que viene lo deciden ellos.

12/3/08

En San Lorenzo, Fellini escribiría en un blog

El Ciclón no da respiro: henchidos de gloria, de buena pasta y de regular vino, volvemos al sacrosanto hogar, a pegarle una repasada a esas novedades que se empecinan en abstraerse de que hoy, para los Cuervos, es un vale por Semana Santa. Así uno se entera de que, además de la gesta potoseña, ayer se disputaron otros partidos por la Copa Libertadores que tiene nombre de banco español (!?). En uno de ellos, los colombianos de Cúcuta ajusticiaron a las Chivas de Guadalajara, que tan lindas nos las hicieron pasar en la versión 2005. ¿El gol? Un viejo conocido de quienes las gastamos por Boedo: Matías Urbano. De él, la mejor definición la dio el entonces DT Pipo Gorosito: "no se quién es, no lo conozco", expresó ante su llegada (Clarín 15-2-04).


Pero, atenti, la jarana no concluye. Repasando el nuevo emprendimiento del Gordo Lanata, un simpático engendro entre el Perfil de hoy y el Página/12 aAF (antes de Alberto Fernández), aparece el vocero de Don Julio, Ernesto Cherquis Bialo, cuidándole las espaldas al ferretero de Sarandí, en un item caro para la grey azulgrana, como es el juicio por esa gigantesca estafa que fue ISL, enjuague en el que casi se nos llevan la dignidad.


Este Cherquis Bialo, escrupuloso protector grondonesco, fue Vocal de la Honorable Comisión Directiva del Club Atlético San Lorenzo de Almagro. ¿Que estamos escabiados? Puede ser, pero no es el tema en debate: la menesunda es que en Boedo la vida es tan dinámica que un día te sacás la foto con Arreceygor (también Vocal, nunca una consonante) y al mes que viene el recibo te lo firma la mAFiA.


Ahora sí, si nos disculpan, nos vamos al sobre. A ver si el Pollito Bottinelli se ensarta a las gallinitas en la excursión trasandina. Llevamos en nuestros genitales la más maravillosa patada, que es la realidad azulgrana.

Dulces sueños.

Esta noche, a celebrar


Háganos caso: 20.45 entra al Templo de Av. Independencia 3527, se pide unos fucciles al fierrito, tinto de la casa y soda, y se va a dormir feliz de la vida. Mientras hace la digestión, pegue una mirada alrededor y detecte las caras felices. A cualquiera de esos, dígale -como si lo conociera de toda la vida-: "Qué alegría, el Ciclón, anoche". Si el fulano no le sonríe cómplice, mándenos la cuenta. Ah, de salida va un fresco y batata, obviamente.

El único

El tipo se llama Eduardo Bejuk e, independientemente de su condición de periodista de Olé, es certificadamente Cuervo. Por eso va su nota, en medio de tanto insidioso que ahora se acuerda del árbitro, de la calidad del rival, de que 3700 metros no es lo mismo que 4000 y que la madre que los parió. ¡A llorar a la iglesia, pelandrunes!

Llorá, Cuervo

Te juro, Dios lo sabe, que estoy llorando. Loco. Feliz. Lloro. Ah, soy periodista. Qué me importa. Lloro. Corro. Me acuerdo de mi viejo. De mi vieja. De mi hermano. De mis amigos. De todos los que me cargaron antes de tiempo porque, pobres, no entienden nada, esto es San Lorenzo, vos que lo sabés desde la cuna, vos que nunca tendrás el privilegio de vestirte de Cuervo y lees igual, de curioso, para saber por qué un tipo grande llora como un nene. El querido Gordo Soriano lo comparó alguna vez (a San Lorenzo) con un sobresalto continuo, un ir y venir de emociones, un palpitar que no te abandona porque ser Cuervo es vivir y morir y revivir y sentirte rey del mundo, sentirte eterno, nos fundó un cura y, mierda que íbamos a estar tristes en el año del Centenario. Dios mío, no paro de llorar, hoy me pongo la misma camiseta que me puse tras cada derrota, porque te seré fiel, te seremos fieles, en las buenas y en las malas hasta el fin. Así nacimos y así seremos eternizados, nunca gané la Copa (ya la ganaré) y soy más feliz que nadie, y lloro, y sueño con la caravana, son las doce y media de la noche y tengo que cerrar este texto mientras lloro, vos festejá por mí, Hermano Cuervo, miralá qué linda viene, miralá qué linda va, nos sobran huevos, nos sobra hinchada, nos sobran motivos para empezar a celebrar los cien años del club que patentó el optimismo, de los que nunca moriremos, a pesar de los años y los momentos vividos. Te amo, Ciclón, y por eso lloro por vos.

El Blog cábala

Por algún motivo ayer, cuando no había mucho optimismo respecto del partido en Potosí, se nos ocurrió crear este espacio. Unas horas después, cuando el partido estaba 0-2, empezamos a pensar si no había sido una pésima idea. Todos sabemos lo que pasó después, así que la felicidad es completa. Dejamos los links de las noticias en los medios y los videos para que todos los Cuervos tengan un lugar adonde concentrar la búsqueda de la info.


¡Aguante, Ciclón!


Noticias:

Medios nacionales: Clarín, La Nación, Página/12, Olé, Crítica, Perfil, Crónica, Diario Popular.
Medios partidarios: Mundo Azulgrana, DeBoedoVengo, San Lorenzo USA.

Video - Resumen del partido - Real Potosí 2 vs. San Lorenzo 3

11/3/08

Para los que creen que no está

Del Gordo Soriano a Eduardo Galeano

Querido Eduardo:

Te cuento que el otro día estuve en el supermercado "Carrefour", donde antes estaba la cancha de San Lorenzo. Fui con José Sanfilippo, el héroe de mi infancia, que fue goleador de San Lorenzo cuatro temporadas seguidas. Caminamos entre las góndolas, rodeados de cacerolas, quesos y ristras de chorizos. De pronto, mientras nos acercamos a las cajas, Sanfilippo abre los brazos y me dice: "Pensar que acá se la clavé de sobrepique a Roma, en aquel partido contra Boca". Se cruza delante de una gorda que arrastra un carrito lleno de latas, bifes y verduras y dice: "Fue el gol más rápido de la historia".

Concentrado, como esperando un córner, me cuenta: "Le dije al cinco, que debutaba: no bien empiece el partido, me mandás un pelotazo al área. No te calentés que no te voy a hacer quedar mal. Yo era mayor y el chico, Capdevila se llamaba, se asustó, pensó: a ver si no cumplo". Y ahí nomás Sanfilippo me señala la fila de frascos de mayonesa y grita: "¡Acá la puso!". La gente nos mira, azorada. "La pelota me cayó atrás de los centrales, atropellé pero se me fue un poco hasta ahí, donde está el arroz, ¿ve?" -me señala el estante de abajo, y de golpe como un conejo a pesar del traje azul y los zapatos lustrados-: "La dejé picar y ¡plum!". Tira el zurdazo. Todos nos damos vuelta para mirar hacia la caja, donde estaba el arco hace treinta y tantos años, y a todos nos parece que la pelota se mete arriba, justo donde están las pilas para radio y las hojitas de afeitar. Sanfilippo levanta los brazos para festejar. Los clientes y las cajeras se rompen las manos de tanto aplaudir. Casi me pongo a llorar. El Nene Sanfilippo había hecho de nuevo aquel gol de 1962, nada más que para que yo pudiera verlo.

*Incluido en "El fútbol a sol y sombra" de Eduardo Galeano.

Una mirada melancólica para empezar

Sólo registro una derrota - Jorge Göttling

Escrupulosamente, como si fuera un rito o una fobia, eludo pasar por Avenida La Plata a la altura de mis recuerdos. Opto por un rodeo, hay un desdén interior por la nueva estética del barrio. Hay en mi corazón una foto sepia del Gasómetro, una instantánea referencia a mi niñez. Con la misma candidez de entonces, pretendo tercamente preservar aquella vieja imagen, las primeras miradas a la cancha de tablones estriados, con el mismo asombro y el mismo sobrecogimiento que provoca depositar la mirada sobre un lugar religioso o una reliquia.

Intuyo que, por las noches, cuando no hay bullicio de banco o de mercado, algunos oídos recogen los gritos de auxilio que da el silencio. Pero, para eso, hay que tener un corazón chapado a la antigua, de color azulgrana.

A veces, merodeo por Boedo, barrio que no me pertenece pero por el que guardo una fidelidad que se parece a un sentimiento. Todavía se parece a una isla, ajena a la ciudad vulgarizada, profanada por constructores desalmados. Conserva viejas costumbres extintas, códigos para ser solo descifrados por una particular criptografía. Cortadas que fueron contadas por los tangos, aromas de la vieja Buenos Aires, arboledas mansas, conocidas sombras, pregones que aun retumban. Pero falta el Gasómetro.

Las fotos antiguas nos permiten un conocimiento parecido a la adivinación. Hubo un club erigido a punta de amor y coraje. Hubo vida épica arriba de los tablones y, también, se edificaron formas societarias de relación debajo de los tablones. San Lorenzo fue un sentimiento y, ya se sabe, cuando se habla de sentimiento es que alguien se ha puesto sentimental.

Pasaron 25 años desde aquella tontería de la historia, una medida calendaria que nos excede. Memoria y balance de lances deportivos, de batallas sin muertos y sin tristezas, de torneos, victorias, empates, campeonatos. En los severos recintos de la memoria, sólo registro una derrota: la del cruel desalojo de ese Gasómetro, que está incorporado, ya, a la galería de nuestros más caros recuerdos.

http://www.clarin.com/diario/2004/12/02/deportes/d-06204.htm