30/4/08

No aflojes ahora, corazón


Nadie sabe cuánto queda de recorrido. Hay miradas exitistas y catastróficas, conviviendo -incluso- en el mismo esqueleto. Pero hasta el más pesimista, el desconfiado pertinaz, le ha acomodado un rinconcito confortable y fresco a la esperanza. Que hoy casi se va al quinto infierno en un par de llegadas de estos condenados, que de a ratos parecían empecinados en renovar su hostil predominio. Por eso el final tuvo tanto de alivio, de recuperación respiratoria, de taquicardia sincopada.

Ahí anda San Lorenzo, dando pelea de igual a igual con los toritos de la cuadra, con la frente bien alta y la moral sólida como el granito. Y con una multitud que duele de verla, tan forjada a golpes de sufrimiento y contracción. En una semanita nos cargamos a los de Villa Luro y sus pretensiones, y a los dos gigantes del poder político-mediático. Las credenciales sostienen esta pretensión noble, postergada y -opinamos nosotros- merecida.

Por las dudas, un pedido: si hasta acá llegamos dando todo lo que hay (poco, mucho, suficiente, según el caso), no empañemos el trayecto con planteos mezquinos, condenados al sufrimiento estético y al resultado complejo. Vayamos con la entereza azulgrana hasta La Plata y Núñez. Y después, sí, que la ruleta elija el destino de sus rebotes sin sentido. Con todas las fichas sobre el paño, y la vista fija en el horizonte.

Video - Resumen del partido - San Lorenzo 2 vs. River 1

28/4/08

El ingenio Cuervo

Las felicitaciones del caso a los muchachos de Mundo Azulgrana, por la genial ocurrencia.

27/4/08

Hoy no importa nada


Si nosotros o ellos o todos jugamos con titulares, suplentes, mixtos o exiliados; si jugamos bien, regular, mal, masomeno; si pudimos hacer más goles o ellos empatarnos; si era offside, penal, roja o corner: nada, absolutamente nada empaña esta alegría.

Todos la pasamos fea la última vez que estos desagradables vinieron a casa. Flotaba -de hecho- en el ambiente, esa mezcla de ansiedad con los dolores frescos de aquella humillación. Por eso, por los días que se vienen, por la historia, por el Centenario, por la familia de cada uno, esta tarde había que ganar.

Misión cumplida. Chaupinela!

Un vermucito de optimismo

Los que leen estas crónicas saben que todo queda tal como fue escrito, pifiadas incluidas. Por eso, cada vez que escribimos en camino hacia la cancha, hay un temor adicional, no menos trascendente que el que encierra la contienda deportiva: el ridículo. Entonces, no vamos a mencionar la cuestión central: sólo diremos que esta mañana, en el Circuito de Catalunya (Barcelona, Azulgrana, su ruta), se impusieron las Feyaris, caras al afecto de esta tribu. Con la impunidad propia de quienes se consideran artífices de su propio destino, hemos decidido interpretar esta señal como un augurio favorable. Al regreso de la patriada, procederemos a la evaluación actualizada.

26/4/08

Amansando a las fieras

Una musiquita tranqui, con título adecuado para sanlorencistas empedernidos ("Los viejos hábitos nunca mueren", en traducción libre). A cargar las pilas, que se vienen dos semanas moviditas, moviditas.

Video - "Old Habits Die Hard" - Mick Jagger ft. Dave Stewart

En manos de Dios

Lo dijimos demasiadas veces como para contradecirlo y/o vulnerarlo: nuestras opiniones son sólo viscerales, y nada pretenden mezclarse con la política partidaria nacional o del Club. Por eso, sólo dejamos la imagen del desmadre y nuestras gracias ... totales para los autores de la brillante idea de vender todo junto un sábado. Asimismo, el habitual reconocimiento al de Arriba, que no mandó la lluvia prometida.

Dicen que el equipo va con Orión; Tula, Aguirre, Bottinelli, Voboril; Rivero, J. M. Torres, Hirsig, A. Torres; Bergessio y Menseguez. No parece una mala solución, en vista del análisis ayer efectuado.

25/4/08

Titulares o suplentes


Dos temas conmueven a la barriada, y ninguno de ellos se vincula con la inexorable salida del Ministro Lousteau: cómo conseguir entradas para los dos partidos que se vienen, y quiénes deben jugar el domingo.

Acerca de la primera, es poco lo que podemos hacer. El abono a la Sur nos garantiza el acceso para el Torneo Local; en tanto que los dirigentes del Club deberían hacer otro tanto con la posibilidad del miércoles. El Tano, participante del desayuno de cada viernes, lanzó una filípica contra la inoperancia dirigencial, que evitaremos reproducir por remanida y por nuestra voluntad de no intoxicar las opiniones con consignas políticas.

La segunda, en cambio, permite restituirnos a una de las funciones inherentes a cada argentino de bien: todos somos DTs. En la contienda matutina, varios se inclinaban por presentar una alineación alternativa, con el objetivo de priorizar la Copa y el argumento de una conducta similar de parte de los bosteros. Los menos, por su parte, sostenían que el domingo tiene que ir todo a la parrilla. ¿Justificativos? Un adagio italiano que reza "plata en mano, culo en tierra", en primer orden; la convicción de que un triunfo ante los xeneizes acarrearía mayor confianza, de seguido.

Los unos dijeron Orión; Tula, Bianchi Arce, Aguirre, Voboril; J. M. Torres, Acevedo, Alvarado, Acosta; Menseguez y Romeo. Los otros Orión; González, Méndez, Bottinelli, Placente; Rivero, Hirsig, A. Torres, D'Alessandro; Bergessio y Silvera. El dato, el único que falta, es saber qué piensa de esta menesunda Ramón, el que decide el fato.

24/4/08

¿Dónde vas a parar hoy?


Se puso lindo el asunto: con ocho fechas por delante, el Clausura parece reservado a cuatro protagonistas estelares. Del mismo modo, la Copa también tiene a ese cuadrado peleando por su esquiva condescendencia. Con profunda convicción, sostenemos que nadie tiene más méritos que nosotros para llevarnos el premio mayor. Ojalá que los que visten la azulgrana, ésa que uno siempre quiso usar y nunca pudo llevar más allá de un picado barrial, acompañen este deseo con un poquito de fútbol, mucho respeto y toda el alma que tengan. Si es así, promesa, no habrá pizca de reproche en la parada en la que nos toque bajar.

23/4/08

Digitontos

Seguimos con la numerología, mientras se extingue la segunda fase de la Copa, y todo conduce al cumplimiento de nuestra predicción del miércoles 17 a las 23.25, también explicitada en el foro de DBV. Continuamos hurgando en las insondables cifras del fóbal, para ver que la Conmebol informa que, disputados 102 encuentros (podemos estirarlo a 108, porque el dato no se modificó), sólo 3 jugadores convirtieron 3 o más goles en un partido. Los artistas, por orden alfabético: Abreu, Washington Sebastián (River 5 - Universidad de San Martín de Porres 0, 17 de abril), Molina, Mauricio (Santos 7 - San José 0, 1 de abril) y Urbano, Matías (Cúcuta Deportivo 4 - San José 2, 8 de abril).

Resulta imposible calcular cuál es la chance matemática de que este fenómeno permita aunar a tres futbolistas que vistieron la azulgrana. "Es de una en un sillón", acota entre fastidioso, escéptico e ignorante uno de los comensales. Otro, vertiginosamente impulsado a la demencia, subraya que, además del pasado común, hay otro arcano oculto en el dato irrelevante: los tres artilleros completaron su respectiva hazaña frente a equipos que incluyen el apócope de santo en su nombre, al igual que el amado Ciclón.

¿Querrá decir algo toda esta tontería? ¿Es un guiño cósmico? ¿Deberíamos consultar con profesionales de la psiquiatría? Es posible, pero conviene estar alerta: como decía aquella famosa serie de los '60, "ellos están entre nosotros".

Apenas


Como en la serie "Volver al futuro", el Ciclón regaló esta tarde otra de sus curiosidades estadísticas: completó una serie de siete partidos sin derrotas, a pesar de haber perdido 72 horas antes. ¿Eh? Como el encuentro correspondía a la sexta fecha, resulta que San Lorenzo se impuso desde la 4ª hasta la 10ª en forma consecutiva, sin perjuicio de que el calendario y la violencia hicieron que le tocara alterar la secuencia.

Esta imbecilidad estadística es una de las cosas más entretenidas que se nos ocurrieron en la tarde de hoy. Porque pedir permiso en un laburo y/o escurrirse del yugo individual ameritan un poquitito más de fútbol, aunque el resultado satisfaga. Como dijimos en otras tantas ocasiones, no está mal ganar jugando mal, porque alienta a continuar y fortalece el espíritu, pero suponer que la lógica va a vulnerarse siempre se parece al suicidio deportivo.

Vienen los bosteros y, casi con seguridad, las gallinas. Sería hermoso presumir que nos va a alcanzar con lo que tenemos. Ojalá se cumpla, por difícil que parezca.

22/4/08

Si no tienen nada para decir ...

... no es imprescindible que se esfuercen.

De capa y ánimo caídos, venimos, luego de la derrota del domingo. No estábamos con ganas de escribir nada, íbamos a subir un videíto y a apoliyar con la convicción de que mañana puede ser mejor. Pero la asociación libre nos llevó a pensar, indefectiblemente, en el sainete que armaron dos personas de las que esperamos un poco más. O un poco menos, pero no lo que hicieron: San Lorenzo es más que cada uno de nosotros, aunque se llamen Ramón Díaz o Tinelli, tengan mucha plata, autos, chicas y fama. Precisamente por eso, no es simpático que los simples mortales tengamos que andar esquivando miradas socarronas cuando se les ocurra armar algún conventillo.

Acerca del DT hemos dado nuestro parecer y lo volveremos a hacer, con prudencia, gratitud, respeto y códigos. Relativizando algunas euforias y amortiguando alguna caída. Como el empresario tiene el celular de él, si tiene algún mensaje se lo puede dejar en el contestador. Si no, a los que deja en ridículo es a nosotros, los que no hacemos guita con esto.

20/4/08

Humo, ahora sólo en Paternal

La mañana era distinta. Se espaciaron las toses, se hidrataron ligeramente las córneas, se veía el viejo bar. El humo parecía haberse disipado, a pesar de que los noticieros y los flamantes "humólogos" insistieran en ratificar su presencia ingrata hasta el jueves, como antes habían afirmado el martes o como podrían sugerir alguna fija para Palermo o San Isidro.

Entonces, la excursión rumbo a ese cajón donde permiten jugar al fútbol se vislumbraba menos tortuosa, sin perjuicio de que el horario acarreara a algunos asistentes pequeñas rencillas conyugales vinculadas a la ausencia en el almuerzo dominical.

Cuando se repase la profusa historia futbolística de Ramón Díaz, no podrá ignorarse su irrevocable condición de argentino. Antes que riojano, jugador o técnico, el tipo exhibe un catálogo de cualidades que lo identifican con lo más notorio del "ser nacional". Así, sin tapujos, cuatro días después de la victoria que nos dio la clasificación a octavos de final, y que él se empeñó en describir como una epopeya (más allá de que se trataba de un triunfo esperable frente a un módico equipo venezolano), el tipo incluye entre los once a su hijo Emiliano, y entre los dieciocho a su hijo Michael, decidido a redoblar la apuesta a la impunidad. Y continúa excluyendo a Bianchi Arce, promisorio defensor que habría cometido el sacrilegio de enemistarse con los vástagos riojo-europeos.

Entonces el equipo es un cúmulo de once nombres, de camisetas conocidas y amadas por los 6000 que nos aguantamos el calorcito, pero es -antes que nada- un guiño taura, un "acá mando yo" exento de sutilezas, de fútbol y de lógica. Si ese mamarracho vence, el inflado entrenador alcanzará la categoría de semidios. Si fracasa, tendrá la oportunidad de endilgarle el sayo al cansancio, a la temperatura, a la rotación, al humo. El de los pastizales, pero también el que se ha acostumbrado a manipular en el mercado de voluntades. Fíjese bien, Amigo Cuervo: acaso en sus bolsillos también haya traído algo del humo. Aunque sea, por falta de cambio de su quiosquero amigo.

19/4/08

Arde la Ciudad


De a poco, los argentinos vamos completando una suerte de paracultura absoluta: granizo, secuestros virtuales, nieve, violencia escolar, retenciones al agro, humo. Como en esas colecciones de fascículos que aparecen sin orden determinado, nuestra biblioteca de catástrofes y pesares va poblando cada anaquel.

Sin contaminar excesivamente estos desvaríos con la individual mirada política, produce azoramiento escuchar a los funcionarios encargados del medio ambiente, la seguridad o la justicia indicar que la responsabilidad es de productores agropecuarios, autores de incendios a granel en la zona norte de la Provincia de Buenos Aires. Ninguno de los aquí presentes tiene conocimiento suficiente para controvertir esa afirmación, pero -con la exclusiva colaboración del sentido común- nos preguntamos si, conforme la lógica expuesta, el siguiente paso de comedia consistirá en anunciar que la culpa de la inseguridad es de los ladrones.

Los periodistas, tan disciplinados a golpe de pauta publicitaria, omiten cualquier repregunta que pueda inflamar el botox presidencial, y todos nos vamos a dormir con la convicción de que nada pudo hacerse para evitar esta hostil sensación de masticar arena, con la que vamos resignándonos a convivir.

Tranquilos, queridos conciudadanos: parece que el martes llueve y que se despeja el humo. No hay tantas garantías, sin embargo, de que el potencial chubasco solucione el resto de nuestras afecciones, pero tampoco es prudente pedir tanto. Ojalá, sólamente, que en el fascículo de la semana próxima no nos toque la frecuente lección denominada "inundaciones". En nuestro barrio ya la vendieron hace unas semanas.

17/4/08

Logaritmos, las pelotas

No nos conformamos nunca. Con el corazón aún apaleado por la ansiedad previa, nos fuimos a apoliyar elaborando cuentitas respecto de los rivales futuros. Antes, con el esquema por el cual el ganador del grupo tal iba contra el segundo del cual otro, uno podía armar el pronóstico sufriente, conforme le fuera en la feria de la fase de grupos. Ahora, la democracia aritmética nos vino a complicar la existencia. Anoche, sin ir demasiado lejos, el Santos se estaba quedando afuera de la siguiente rueda. Clavó un golazo medio de milagro, y automáticamente reordenó la fila poniéndose al tope del cardumen de escoltas.

Hoy, con cinco grupos definidos y tres en veremos, San Lorenzo se ubica en la posición 12, sin chances de subir, pero sí de bajar: el segundo de la zona de los bosteros debería quedar por encima, y también el de Flamengo-Nacional-Cienciano, salvo que los peruanos ganen 1-0 en Montevideo, lo que no parece tarea sencilla. Los únicos grupos cuyos segundos quedarían debajo nuestro son el de Atlético Nacional y São Paulo, salvo una matemática también compleja, y el América que acaba de perder con la Católica. De este modo, San Lorenzo va a la ubicación 14, que empareja con el número 3. Asignado el 1 a Fluminense, llegan con chances de conseguir el 3 River (lo tiene ahora), Flamengo y Atlas. Atlas juega en Santiago con Colo Colo, lo que no es moco e' pavo, considerando que los chilenos también quieren seguir. El asunto sería averiguar si el Flamengo le gana al Coronel Bolognesi (hay que aflojar con algunos nombres, opinamos nosotros, esto se va de madre) y, en tal caso, por qué guarismos. Si hace cinco, queda al tope, si hace uno o más, va al lugar 2. Así, el 3 le correspondería a las gallinas, para reeditar aquella eliminatoria del '96, con el rebote de Passet, el cabezazo desviado del Cabezón y la angustia de irnos a casa otra vez temprano.

Es bravo, no nos vamos a engañar. Desde que Ramón llegó a Boedo, le queda una sola cuenta pendiente. Lindo sería saldarla en la Copa, para terminar con cualquier debate. Pero es un equipo que todavía no se asentó, que gana pero no convence, que puede caerse en cualquier momento. De ellos hablamos, más allá de que la descripción también nos comprenda.

No es verosímil que un grupo de tipos grandes se estruje el melón analizando ecuaciones de partidos en los que juegan peruanos y ecuatorianos. Por eso mismo, opinamos con impunidad, nos merecemos un resarcimiento. Ganar en casa, regular afuera, jugar con la desesperación ajena y no con la propia.

¡Dale, Dios! No te cuesta nada. Lo nuestro es a puro esfuerzo, sufrimiento, heroísmo de barrio, mientras ellos son una multinacional del poder, futbolístico y del otro. Fijate bien, hacé vos también las cuentas y vas a ver que el pedido es razonable, aunque interesado. Pensalo, no te apures ni te sientas condicionado, que nosotros ya estamos planchando el smoking.

16/4/08

Que nos quiten lo bailado


Lo bueno es que dijimos todo antes: que queríamos ganar, que no íbamos a ponernos quisquillosos respecto de los modales, que era importante meter un gol rápido. Si hasta a Bergessio anotamos como el candidato a scorer. Modestamente.

Venimos relativamente derechos: desde que abrimos este boliche, el Ciclón jugó ocho y ganó siete, pasó de punto a banca en el Clausura y clasificó a la Copa, cuando ya había algunas coronas encargadas para el previsible velatorio.

Y, sin jugar conforme los paladares exigentes, se ha convertido en un equipo sólido, en un plantel funcional y un adversario que ya no les cae tan simpático a los rivales. Condiciones ideales para imaginar algún avance mayor en la Libertadores. Hay que esperar una tómbola que no para de girar, que hoy trajo la derrota por goleada del Cruzeiro y ahora arrima la victoria parcial del Cúcuta (el cuco, valga la chanza) en Brasil. No es momento de añorar empates no obtenidos ni goles desperdiciados. Es la oportunidad de afirmar la fortaleza de local, y jugar las eventuales revanchas con los nervios ajenos.

Pero eso será mañana. Ahora, los nervios reclaman el suspendido almuerzo y algún tinto que, sin mayores pretensiones, nos deje cerrar los ojos con la satisfacción del deber cumplido.

Sufrir, siempre sufrir

La ansiedad truena en las tripas: todavía falta un rato -que parece eterno- para emprender la peregrinación herética. Con ese remolino de sensaciones que hace recordar la gráfica del Batman de los '60, donde la suma de los colores y los grises impedía distinguir las formas. Ahí andan la confianza, el temor, la felicidad por el Estadio repleto, la preocupación por la cantidad de jettatores que puedan hacer su debut, la magra historia del fútbol venezolano y su reciente crecimiento, todos apiñados, empujándose como jubilados ante la puerta giratoria del banco.

Se necesita un gol. Uno solo: independientemente de que pueda ser beneficioso incrustar media docena, pensando en las fases ulteriores. Pero el primero es clave. Pronto, para evitar que la angustia se convierta en el decimosegundo jugador visitante. Y, naturalmente, al quinto infierno con cualquiera que se ponga a discernir si se juega bien, mal, pésimo o categorías aún más abyectas. Que le rebote a Bergessio en el glúteo y entre; que Aguirre se resbale en algún corner, para defender su propia antiestética y la clave en un ángulo; que el Bernie entre y defina, como tantas veces. ¡No! Eso querría decir que hubo que esperar hasta el segundo tiempo y no sabemos cuántos bobos resisten hasta esa hora.

No es tiempo de reflexionar sobre el equipo, sus merecimientos o la formación de hoy. Porque no son ellos los que nos preocupan: el crédito es todo nuestro, de los que nos hemos ido de tantas canchas silbando bajito y escondiendo la trompa, de los que cada año tenemos que soportar las crueldades de bosteros y gallinas, amargos y empleados, pero también de pinchas, bichos y hasta de los del club chico de Liniers. Ninguno la yugó como nosotros, señores. Y lo único que ahora pedimos es un numerito para la tómbola final, la de la eliminación, aunque nos toque con el Santos de Pelé o con el Ajax de Cruyff. Ahí, en el revoleo del mano a mano, todo es posible. Dejanos esta chance, Barba: permitinos jugarnos la esperanza a suerte y verdad. Ya sabés, después no esgunfiamos más.

Si al menos se pudiera apoliyar una siestita, para hacerlo más corto ...

13/4/08

La Máquina


Venimos dulces, amigos: había que ganar y se logró. Se obtuvo el sexto triunfo consecutivo, con once goles a favor en los últimos tres (curiosidad: los tres arrancaron 2-0 y provocaron zozobra en el 2-1), y quedamos a tres puntitos de las gallinas, con un mundo aún por delante. Pero, además del balance estadístico del Torneo Local, la victoria de esta noche es una picada imprescindible para llegar al miércoles con confianza, sumada a la expectativa y a las ganas. En los últimos partidos, el equipo viene demostrando una contundencia inapelable, virtud que puede resultar decisiva en los tramos eliminatorios de la Copa.

Por otro lado, crecieron algunos rendimientos individuales, por lo que Ramón tendrá alrededor de 15 jugadores en un nivel parejo, de donde elegir para armar el once inicial, pero también para prever variantes conforme el resultado y el trámite lo exijan.

Faltaría lograr, si se permite un minuto de reflexión en medio de la alegría, que el equipo sepa manejar mejor el resultado favorable. Más allá de la casualidad o no de los últimos encuentros y su tanteador, San Lorenzo pudo conseguir más ventaja cuando doblegó a su rival, pero pasó momentos de innecesaria angustia. Esto, que ahora engrosa el anecdotario, puede tener un final distinto ante adversarios de mayor envergadura. Asimismo, en el propio partido del miércoles puede resultar determinante la aptitud de conseguir alguna diferencia de gol, pensando en el escalonamiento que defina los cruces de las siguientes fases.

Se vienen tiempos decisivos, partidos con poco margen para la recuperación física y casi nula chance para el error. El plantel parece haber madurado y se muestra en el mejor momento de la temporada para afrontar esta etapa. Ojalá que así sea.

Mañana, ravioles calentitos y fútbol ajeno, con la tranquilidad de haber cumplido el deber propio.

Video - Resumen del partido - San Lorenzo 3 vs. R. Central 1

12/4/08

¡Maldición, va a ser un día hermoso!

Juega el Ciclón y toca el Indio. ¿Qué más querés, corazón?

Video - "Queso Ruso" - Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota (En vivo, Obras 1991)

"Central y el Ciclón ..."

Andamos remolones, hay que decirlo. La mezcla entre las ocupaciones cotidianas y el bajón posterior a las celebraciones centenarias han configurado un pequeño piquete bloggeril, mientras "se suceden reuniones intersectoriales que buscan normalizar la actividad", como describiría algún matutino.

En ese contexto, esta noche juega el Ciclón, con la chance de confirmarse como un candidato para el torneo local, mientras espera por el miércoles, la primera de las cinco finales que quedan para reservar el pasaje a Tokio. Y cada vez que San Lorenzo enfrenta a Central resulta inevitable para nosotros recordar esa ambigua procesión a Arroyito en el frío junio del '95. Viajábamos cinco individuos (uno era poco más que un gurrumín) en un auto abollado y temeroso. El silencio era el sexto compañero y un presagio. Nos debatíamos entre la necesidad imperiosa de estar, de suponer que nos aguardaba la historia, después de 21 años de odiseas, y la implacable matemática que nos condenaba a escuchar la radio para ver si los triperos por fin aflojaban. Es por todos conocido el final, la locura desatada en tribunas y césped, y aún la interminable serpiente azulgrana que pobló la ruta de regreso.

Pero entonces había algo más que nos animaba, y que hoy se ha perdido. Desafortunadamente, para quienes aquí habitamos. Ir a jugar con Central era ir a casa de unos amigos, de unos parientes de los que no fastidian, a cantar unidos contra la Lepra y la Quema, a saber que no había peligro de llevar hasta allá a los pibes. Alguno de nosotros recuerda todavía los albores de aquella relación de respeto mutuo y fraternidad. La hemos pasado feo en alguna de las últimas visitas (el día del 4-0, con dos goles del Pata Pereyra, sin ir más lejos). El temporal de la modernidad y la reconversión de las antiguas "barras" en esta cruza de empresa con asociación ilícita nos dejó sin esa posibilidad. Que añoramos, francamente. Que nos sigue poniendo del lado canalla, del de Fontanarrosa, Olmedo y el Che, cuando se juega el clásico rosarino.

A sacudir la melancolía, corazones. A entonarnos para hoy, para el miércoles y para cada una de las batallas que se apiñan en el calendario inminente. La Gloria todavía vive en la vereda de enfrente, y mira con picardía e insinuación, esperando que de una buena vez crucemos la calle y la hagamos nuestra para siempre.

10/4/08

Que cumplan muchos más


TRES AÑOS A PURO SENTIMIENTO

Buenos Aires, 10 de Abril de 2008

Hoy se cumplen 3 años de la creación de la Subcomisión del Hincha "Domingo Vaccaro", nombre del querido e inolvidable Minguito "el farolero", que pasó a la historia como el 1º hincha de San Lorenzo de Almagro.

Tres años de intenso trabajo de mujeres y hombres que sueñan con un San Lorenzo distinto, intentando recuperar aquellos valores fundacionales que nos legaron nuestros fundadores.

En la búsqueda permanente de recuperar aquel San Lorenzo que funcionaba en todos los órdenes de la vida.

Así se hicieron algunas cosas, las cuales hacen las grandes cosas en la vida de una Institución: fueron inolvidables los festejos del día del niño en la Ciudad Deportiva en 2005 con más de 2000 pibes de familias de muy bajos recursos económicos, al igual que en 2006 y 2007 en la Plaza "Lorenzo Massa", la fundación de la Biblioteca "Osvaldo Soriano" con la colaboración fundamental de muchos Sanlorencistas en el GCBA, después de décadas de haber perdido la enorme Biblioteca que tuvo San Lorenzo, hoy con más de 5.000 tomos.

Los espectáculos GRATUITOS para la comunidad toda, festivales de rock, homenaje a Pappo, veladas de tango y folklore, apoyo escolar GRATUITO en la Biblioteca, el acompañamiento del colorido en la tribuna, el abrazo al querido Gasómetro cada 2 de diciembre y la decisión de luchar por VOLVER a tener la sede gigante en Boedo y el Estadio donde nuestros fundadores decidieron que debía estar, con toda la vida Deportiva e Institucional que brindaba, Avenida La Plata al 1700. Lograr el Padrinazgo de la Plaza Lorenzo Massa y recuperarla definitivamente junto al PUEBLO AZULGRANA en Octubre de 2007, las caravanas en los últimos cumpleaños de San Lorenzo y la inolvidable Caravana Centenaria con casi 20.000 cuervos y el festejo del 1º de Abril en Av. La Plata.

Muchas cosas se hicieron con el corazón, en muchos casos sin recursos, con mucha imaginación, en forma extraordinaria, buena , regular, o mala, cada socio o simpatizante tendrá su opinión, pero lo indiscutible es que se realizó con esfuerzo, pasión y amor por estos sagrados colores.

Fueron horas de trabajo, de debates, de intercambios de ideas, sí, ideas en favor de la Institución algo que no abunda en San Lorenzo.

A tres años de su nacimiento, la Subcomisión del Hincha renueva su compromiso con el hincha azulgrana y la comunidad toda, siguiendo el camino y el ejemplo de los Próceres que construyeron un San Lorenzo gigante.

SUBCOMISION DEL HINCHA DEL CLUB ATLETICO SAN LORENZO DE ALMAGRO.

8/4/08

Blonde On Blonde - Fabián Casla (*)

(*) El nick corresponde a Fabián Casas, prestigioso narrador y poeta del Barrio de Boedo, hincha -naturalmente- del Ciclón, recientemente premiado por su obra en Alemania. Algunos de sus delirios pueden bucearse en los blogs El Ciclón y la Furia y Mal Elemento.

Bob Dylan fue el primero en sacar un disco doble. El San Lorenzo del Toto Lorenzo fue el primer equipo argentino en salir bicampeón. En el lado uno, el Metropolitano, en el lado dos, el Nacional. Fue en el 72. Yo tenía siete años. Recuerdo estar en la cama de mis viejos, a colchón pelado -mi mamá sacaba todas las sábanas cuando limpiaba su dormitorio- viendo en blanco y negro la final que se estaba jugando en Núñez entre San Lorenzo y River. Como ya nos pasó varias veces en la historia cuando jugábamos un partido definitorio, esa tarde erramos un penal. Después el Lele Figueroa puso el uno a cero definitivo. Me acuerdo de que mi viejo volvió de la cancha y me alzó y me abrazó y me besó. Estaba afónico porque había estado en el Monumental desgañitándose, algo que sigue haciendo aún hoy a los 79 años.

¿Pero habrá sido así? O en realidad el día que me abrazó fue cuando volvió en el 74 después del partido contra Ferro, donde tiraron gases lacrimógenos y nos coronamos campeones con Zubeldía en el banco. Estaban Scotta y Ortiz, dos delanteros letales. Me acuerdo que en esa época se decía que Scotta ponía sus pies en un horno y que por eso lograba sacar esos terribles chutazos que se incrustaban en la red. Sí, eso decían.

Me acuerdo del Gasómetro, de la tribuna de los niños, pegada al alambrado por donde veíamos pasar corriendo al Sapo Villar. Me acuerdo del Mono Irusta en las figuritas superchapitas, con un buzo celeste. Había también una tribuna de mujeres y una para jubilados. El Gasómetro tenía olor a madera, porque estaba hecho con tablones. Después, en el 74 vino el Mundial, la muerte de Perón... Me acuerdo del Ratón Ayala llorando en la concentración alemana. Me acuerdo de la propaganda de Interminable, con la voz finita. Y el día que nos fuimos a la B, con mi papá enjaulado en su dormitorio, en pijama, sentado a los pies de su cama matrimonial, como un coloso sumergido.

Me acuerdo del mejor jugador que vi en mi life: el Gordo Rinaldi. El nos cuidaba -como un guardián en el centeno- cuando nos tirábamos a lo más hondo en la pileta de la ciudad deportiva. Me acuerdo de verlo venir corriendo hacia mí, que estaba en la popular de Vélez, en ese año que volvimos a la A y en el que casi ganamos el campeonato metiendo miles de goles. El gol de Husillos en Córdoba, desde la mitad de la cancha... Me acuerdo de la placita Butteler, un lugar onírico, como las pinturas metafísicas de De Chiricco. Podés pasar por uno de sus lados, pero no la vez, el teorema de la Butte: un lugar sin fin donde se juntan los extremos del horizonte azulgrana.

Me acuerdo de Tití, un amigo del barrio que inventaba las canciones de la barra del Casla. Mientras las iba componiendo, movía el dedo índice de la mano derecha, como si fuera una batuta invisible. Y la pantalla dividida con Gimnasia e Independiente por un lado y el Casla vs. Central por el otro. Infartante. O en el 75, cuando Alonso me hizo llorar porque nos lastimó con la belleza de su juego demoledor. La camiseta azulgrana del 68, con botones, la de piqué del 72 con cuello en V. La del Gordo Rinaldi blanca y con cuello largo. Recuerdo a mis amigos juntándose en la esquina de Boedo y Estados Unidos para salir caminando hasta Avenida La Plata. O los domingos en los que esperábamos que abrieran las puertas para entrar en el segundo tiempo.

Recuerdo una tarde de lluvia, un partido malísimo contra Ferro que ganábamos dos a cero y perdimos cuatro a dos. Mientras ganábamos nosotros cantábamos: "matadores/matadores". Cuando Ferro lo dio vuelta, nos contestaban; "de polillas, cucarachas y ratones". Recuerdo el ambiente expresionista del Gasómetro de noche, un partido contra Argentinos Juniors en el que Maradona nos dio un pesto bárbaro. Recuerdo las miles de cábalas que no sirvieron para nada. Y las que sirvieron para todo.

Hoy cumplimos cien años sin soledad. Una fuerza colectiva construida por mis seres queridos. Un pequeño lugar en el universo en el que me mantengo con una pequeña ayuda de mis amigos. Salud, Ciclón.

http://malelemento.blogspot.com/2008_04_01_archive.html#9020616267534622985

7/4/08

"Sin merecerlo"

Varios de los comentarios (televisivos, radiales, gráficos) sobre el encuentro de ayer consignan que San Lorenzo no fue superior a Tigre en el desarrollo del juego. Conviene desglosar esta afirmación, a priori una imbecilidad considerable, antes de calentarse demasiado. Se puede ganar un partido 1 a 0 aún bajo el dominio de terreno y pelota por parte del rival (así nos ganaron los sanjuaninos en la segunda fecha o, para excluir la subjetividad que involucra al Ciclón, así le ganó Argentina a Brasil en el Mundial '90). Puede ocurrir que la ventaja de un resultado no refleje exactamente la proporción de tenencia de balón o de situaciones de gol, y que una goleada sea exagerada o que una diferencia exigua pudiese haber terminado en un resultado más abultado.

Lo que no resiste quince segundos de reflexión es la afirmación de que el equipo que se impuso 5 a 1 no haya hecho méritos para ganar. Independientemente de que el derrotado haya sido el subcampeón del torneo anterior, o que ningún equipo grande haya ganado en Victoria, datos que engrandecen el triunfo, se ataca la esencia misma del deporte en cuestión: convertir goles no sólo es una parte importante del juego, sino que es la única forma conocida hasta la fecha para dirimir el resultado de un encuentro. El equipo que tuvo la capacidad de clavar cinco pepas y el esfuerzo para evitar que le convirtieran más de una, es el incuestionable vencedor, por perogrullesco que ello suene.

En definitiva, que revienten. Pero convengamos que es bastante indignante tener que "defenderse", cuando deberíamos estar abocados exclusivamente al festejo. En compensación, van los goles de la "inmerecida" goleada.

Video - Resumen del partido - Tigre 1 vs. San Lorenzo 5

6/4/08

Rayos y centellas

No reinaba el optimismo, convengamos. La derrota del jueves, y aún más sus modales, invitaban al confort codificado. La formación mixta tampoco alentaba. Uno de los próceres, que completó en el fin de semana la exacta "sábado a las 10 en Varela-domingo a las 17 en Victoria", disparó en el transporte: "Hoy se destapa Menseguez", sin anestesia ni elementos probatorios que justificaran la afirmación. En defensa del osado, y de algún geronte que quedó en el barrio arropado por la televisión, debe decirse que ambos reivindicaron la actuación del Rayo en el partido ante Lanús, aún cuando muchos habíamos quedado esa noche deslumbrados por la performance de D'Alessandro.

Y el Rayo hizo tres, sin filigranas estéticas, pero demostrando que puede laburar de delantero. Porque las características de ese empleo requieren concentración, obstinación, caradurismo (ahí anda el tal Palermo rompiendo records y paciencias con poco más que eso). Virtudes que hasta ahora, esta fusión de Carranza y el Yaya Rossi no había exhibido, y que hoy tiró al paño con desfachatez y precisión.

Entonces, cuando el libro de esta semana va cerrando, queda un balance nada despreciable. Las dos victorias ante los cucos del Apertura, la recuperación de algunos jugadores y de la capacidad de ganar por otro resultado que el 1-0, arman un "haber" satisfactorio. En el "debe" queda el desdibujado equipo de Ipatinga, que también repunta en la cuenta final por la mano que nos dieron los potoseños al ganarle al Caracas. En la Copa dependemos de nosotros y de una victoria accesible a un equipo venezolano en casa; en el Clausura ya llegamos al lote de arriba y tenemos un pendiente ante el desflecado Vélez. Si alguien narraba este panorama al concluir febrero, uno firmaba con las dos manos y un pie, así que ahora no la vayamos de exquisitos.

Apostillas: gracias a los que organizan la venta de entradas, a los que diseñaron y remodelaron esa cancha, a los que permiten que un grande juegue ahí, a los que colgaron un millón y medio de banderas para que uno adivine el partido y, en líneas generales, a todos los que acompañan nuestra cotidiana mediocridad.

Mientras llegan los audaces


Corresponde a los valientes y optimistas que viajaron hasta Victoria la crónica pormenorizada del encuentro. Los que -con algunos achaques encima- vimos el match por Ticespor, sólo tenemos una cosa para decir. Incomprobable, frente a los desconocidos que naveguen desprevenidos por aquí; fácilmente demostrable aún a los escépticos con los que circunstancialmente compartimos la autoría de nuestros divagues: Menseguez es un jugador interesante. Hoy, para colmo de bienes, mostró la que parece su virtud más escasa: el gol. Pero exige, va por los dos costados, es rápido. Tiene, en suma, muchas cualidades que nos evocan al Pipa Estévez, incluyendo algunas corrientes de frío polar en el interior de la sesera. Pero si se lo modera, se le habla, se le da confianza, puede hacer barullo en algunos partidos bravos en el exterior. Ojalá.

El reporte verdadero, insistimos, cuando llegue la muchachada. Entretanto, salud.

4/4/08

Un recuerdo triste

Ocho años y tantas preguntas que, al no admitir respuestas que aporten consuelo, sólo contribuyen a un dolor amargo, innecesario. El pibe Mirko era un jugador elegante, una "promesa", aunque el sustantivo ahora nos lleve a compartir la culpa de su partida temprana, pensando que tal vez ese rótulo fue una de las cargas que no pudo abandonar.

Pero, aún peor, es la sensación de que el fútbol actual nos depara una de estas tragedias a la vuelta de cada esquina. Con su mofa a la psicología, con su improvisación y su urgencia, con la sensación permanente y reforzada de que el show sigue a como dé lugar. Si hasta el Querido Ciclón se permitió entrar en el vértigo inaceptable, jugando un partido de Copa unas horas después de esa noticia que apuñalaba el alma.

Un abrazo, Mirko. Ojalá que estés mejor, donde fuere. Esperamos no enviarte compañías jóvenes, porque sólo será una muestra del recurrente fracaso.

Video - "Tears in Heaven" - Eric Clapton

3/4/08

Maneras de perder


Esto ya lo dijimos y lo volveremos a hacer: la derrota es uno de los tres casilleros que tiene la ruleta del fóbal, así que no sorprende a nadie esa alternativa. Ahora, hay distintos modos de hacerlo. Uno puede intentar, plantarse de igual a igual, y ver cómo sale la historieta. Pero cuando un equipo aparece diseñado para aguantar, no sólo el 0-0 sino inclusive el 0-1, la patinada empieza prematuramente. Si el gol inicial viene sobre los diez minutos, el calvario es extenso y el final previsible. Este equipo ha jugado de visitante más que mal en la Copa (con la única excepción de los 20 minutos finales ante el Potosí), y ahora le van a tocar varias paradas bravas de manera consecutiva. Primero hay que ganarle a Caracas, después enfrentarse con el ganador de algún grupo, y saber que se define en casa ajena. Preocupa la ausencia de temple para encarar esa clase de compromisos. Sería importante que el entrenador pueda trabajar en eso. Con los jugadores, naturalmente. Con sus fantasmas, para arrancar.

Uso indiscriminado de la adjetivación

Algunos de los presentes, hemos sido criados en un clima de bastante libertad. Al mismo tiempo, como en todo sector de la clase media, aparecían unos pocos principios rectores, cuya violación acarreaba no pocos conflictos dialéctico-morales. El padre de uno de los contertulios le ha expresado a su hijo, y a quienes solíamos morfar ocasionalmente en el hogar del aludido: "No digas que esa comida es fea, decí que a vos no te gusta". Aunque parezca una sutileza, el precepto sirve: lo que a mí no me gusta, al vecino puede parecerle un manjar. Sin ir más lejos, durante el tipeo del presente texto ya se han producido dos debates referidos a las nueces y a las aceitunas, con protagonistas cruzados.

La fábula viene a cuento de nuestra "herejía" nocturna, por la cual indicamos que el evento de ayer no nos había resultado el mejor. Hemos escuchado y leído una cantidad importantísima de opiniones favorables y algunas menos que compartían algunas de nuestras críticas o exponían otras. Para dejar absolutamente claro el conflicto que -a nuestro juicio- envuelve a la sociedad sanlorencista, el martes por la mañana se produjo el siguiente diálogo entre uno de los redactores y su cónyuge: "- No sabés qué emotiva fue la caravana de anoche (por el 31/3 a las 24 hs.)", "- Yo no puedo creer que quince mil tarados se junten enfrente de un supermercado", respondió impertérrita la perversa en cuestión. La frase anterior nos hiere gratuitamente. Sin el adjetivo, era perfectamente admisible: nosotros vamos; la mina, no. Ella no nos entiende; nosotros felices.

Del mismo modo, ayer alguien dijo que nuestro comentario suavemente crítico (hemos escuchado opiniones mucho más contundentes, cuasi malintencionadas, diría Cristina) nos asimilaba a la condición de "quemeros". ¿Hace falta? Pareciera que no, que alcanzaba con decir "para mí la fiesta estuvo bárbara" o aún "lamento que no hayas podido compartir la emoción que nos produjo a los demás".

Es importante dejar aclarado que este texto no es una defensa de nuestras opiniones. Menos aún, frente a quien se hubo tomado el trabajo de leer las sensaciones allí volcadas. Pero pareciera que este nivel de virulencia al opinar es menos un problema formal y mucho más una cuestión de fondo: no es casual que en San Lorenzo exista tanta gente inteligente, creativa y bienintencionada, y que el producto sea un Club que nos propina más preocupaciones que alegrías. Nos empeñamos en dividirnos más rápido que en compartir o coincidir, aún cuando la afinidad supere al circunstancial disenso.

Ojalá que el clima festivo mejore estas sensaciones, que podamos escucharnos más y combatirnos menos. Para crecer, si se puede.

2/4/08

Del curita y el tranvía a Tinelli televisado por Hadad

Un sabor raro, como el que deja la sacarina, a la que ahora los muchachos llaman "edulcorante". Esa es la descripción más fiel de las sensaciones vividas hace un rato. Porque aparecen algunas características conocidas, queribles, fotos, videos y personas que siempre da gusto ver y recordar. Y en el medio, desplazándolas a un lugar secundario, una catarata acaso demasiado extensa de personajes cuya vigencia es más que cuestionable, que conforman un equipo parecido a esos "dream team" que arman los clubes del interior en los torneos regionales. Seamos honestos: ni uno sola de estas celebridades atraviesa un momento de gloria, la mayoría no son del Ciclón y cultivan un perfil entre melódico y demodé que no ayuda a la jarana.

La selección de los deportistas que ocuparon el micrófono tampoco evita la polémica: el Bambi puede estar más allá del bien y del mal, pero los dos goleadores escogidos son individuos que no tuvieron palabras afortunadas para el Club cuando la moneda los llevó para la Ribera. En cambio, Omar Higinio, Albrecht, el Sapo, Telch, el Lobo, el Gringo o los deportistas de tantas disciplinas gloriosas sólo consiguieron un taburete vecino al estrellato.

En fin, que todo no se puede. Que también hay mucho celebrador de esta alegría guionada (no parecía necesario que a Michelini lo hicieran leer, que no resulta ser su fuerte) y que lo importante es que estuvimos todos juntos, por un rato. Pero para ser honestos, esperábamos un poquito más. Acaso, nos esperábamos a nosotros. Con menos pantalla gigante y audífono supersónico, con un poquito más de alma.

1/4/08

Divina ciclotimia

Veníamos fenómeno. Todavía celebrando el rotundo éxito de la convocatoria de anoche, arrimándonos a Tierra Santa, empezamos a observar con preocupación que arriba también se juntaban. Nubes, en este caso. Un rato después, zarpó una caravana menos nutrida, revalorada por el hecho de que era castigada por un diluvio terco. La llegada al Nuevo Gasómetro sólo sirvió para confirmar la previsible suspensión de la fiesta y enfilar de regreso.

El retorno trajo nuevas alegrías: Potosí iba 2-1 arriba y terminaría 3-1, abriéndole puertas a la deseada clasificación. Parecía que Dios había decidido que la jornada de hoy terminara tablas.

Pero la puñalada artera llegó sobre el cierre de un día trajinado y eufórico. Los puntillosos de las pesadillas futbolísticas recordarán el fugaz y olvidable paso de Mauricio "Mao" Molina por el Ciclón, aventura que terminó con él en el banco, Alfaro en su casa, el equipo en la mediocridad, más deudas en Tesorería y -acá apostamos a memorias en declive- un solo gol en una noche rosarina. El asunto es que el tipo, ahora en el Santos que fuera de Pelé, se despachó con cuatro pepas en la victoria 7-0 ante el endeble San José de Oruro. Sólo para recordarnos la afición del de arriba al humor ácido.

Mientras tanto, aquí en Ciudad Gótica, dejó de llover un ratito después de la cancelación. Pa' joder, nomás.

Imágenes paganas

Uno de los tantos videos que ya empezaron a circular de los festejos de anoche. Para seguir celebrando.

Video - Caravana Centenario - 1/4/2008, 00.15 hs.

Bajando la cuesta


Es que siempre tenemos algo más para pedir, Señor. Que no nos vayamos a la B, que volvamos, que se haga la cancha nueva, que cortemos la racha de los 21 años, que venga la primera Copa Internacional. Y cada vez intentamos engrupirte con lo mismo: es la última, danos ésta y quedamos hechos. Pero somos unos embusteros de poca monta, unos chiquilines en envase XL, incapaces de engañar con eficacia. Siempre sabemos que vamos a volver, con muchas misas en deuda, algunas promesas pagadas en cuotas y algún catálogo remozado de mangazos.

Entonces, hasta anoche, era "dejanos ver el Centenario, ordenamos los papeles y nos llevás cuando necesites personal". Pero ahora, desvencijados por los años, las emociones y las sacudidas (si Ud. superó los 50 y los 90 kilos, y anda con algún achaque óseo, sea piola: no ande saltando como un mico, por más que no sea ni del globo ni bostero, o cómprese una bolsa de hielo cuando vuelve a la catrera), queremos añadir las dos últimas, las del estribo, las que venían en lugar de las papas fritas. A como va el asunto, casi podríamos alegar que se trata de minucias, de pequeños detalles que a Vos no te van a cambiar la cuenta. Si con nosotros la libretita del fiado ya defaulteó, Señor. Deberte 100 ó 102 va para la anécdota estadística.

Por eso, si está a tu alcance, nos complacería particularmente pensar que una tarde cualquiera vamos a andar peripateando por Avelino Díaz, distraídos, en la búsqueda de un café que nos permita recrear la amistad, y que la visión va a verse interrumpida por esa presencia hoy camuflada. Que un día el Gasómetro va a volver a erigirse majestuoso y eterno, que vamos a poder entrar a ver un partido ahí, o aunque sea a sentarnos en unos tablones para mirar la tarde, para sentir el imponente esqueleto de hierro y madera sobre nuestras cabezas, que nos permita saber que estamos nuevamente en casa, sin los Viejos, pero protegidos de todo.

En el camino, que ojalá no sea demasiado extenso, fijate si combinás apenas las ecuaciones para que nos toque la Copa. Que no va a cambiar nuestra grandeza, está claro, pero que nos va a sacar la espina cruzada y que va a aventar los comentarios de la gilada.

Ahí sí, con eso se cierra el sport. Baldeamos bien todo, afeitada a pelo y contra, y nos sentamos a esperarte con un matecito, para cuando dispongas. ¿Tokio? ¿El Campeonato Mundial? Pero, Viejo, tampoco somos abusadores. Eso, si queda lugar, te lo pedimos la vez que viene. La última.

Con permiso, es hora de recoger los trastos de esta maravillosa fiesta (Eternamente Gracias, muchachos de la SubComisión). Acá abajo, en nuestra calle, se terminó la fiesta. Pero habrá otras, palabra de Cuervos.